Tegucigalpa, Honduras
En una cárcel para ciudadanos hondureños extraditables se ha convertido el Centro de Detención del Escuadrón de Operaciones Especiales Cobras.
Actualmente en ese recinto carcelario permanecen detenidos los hermanos Luis Alonso, Miguel Arnulfo y José Inocente Valle Valle y su esposa Marlen Gricelda Amaya Argueta.
El martes se sumó a la lista Héctor Emilio Fernández Rosa, alias “Don H” o “Yeto”; todos integrantes del cartel de los Valle, según el gobierno de Estados Unidos, que los pide en extradición por actividades de narcotráfico.
Entre los presos, y también extraditable, se encuentra Juving Alexander Suazo, segundo al mando de la organización criminal que manejaba Carlos Arnaldo “Negro” Lobo, extraditado al país del norte por tráfico ilegal de drogas.
De los seis extraditables a cinco ya se les inició el proceso de extradición y hoy será presentado Héctor Fernández ante un juez de extradición de la Corte Suprema de Justicia, detenido ayer en un sector de El Hatillo, Tegucigalpa.
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Celdas blindadas
Los presuntos narcotraficantes han sido enviados a los Cobras, que es considerado como un centro de detención de alta seguridad, pues sus paredes y techo son blindados para evitar cualquier tipo de atentados. Este lugar está construido para albergar seis personas, pero actualmente son 15 los reclusos que permanecen en él, por lo que en cada celda se ha colocado una cama adicional y en el caso de las mujeres se habilitó otro espacio.
EL HERALDO conoció que las paredes del recinto son de doble fundición y entre ellas se colocaron láminas de metal, mientras que en el techo se hizo una fundición de tres pulgadas de espesor, luego se colocaron láminas de metal y sobre ellas se fundió una plancha de concreto de dos pulgadas de grosor, blindado así por completo todas las instalaciones.
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Además, el recinto es custodiado por elementos Cobras, TIGRES y del Instituto Penitenciario, por lo que no existe posibilidad de una fuga.
Los reos permanecen monitoreados por 16 cámaras de seguridad las 24 horas del día, las puertas de sus celdas tienen un doble control para abrirlas, es decir que desde un centro de monitoreo se abre un primer seguro y luego lo hace el centinela.
Si en el centro de monitoreo no se autoriza que la puerta se abra, el custodio no puede hacerlo, pues el mismo sistema computarizado no se lo permite.
Otros reclusos
En el módulo de alta seguridad también se encuentran recluidos: Víctor Alfonso Flores, Jesús Gumaru Jaime Estrada (mexicano), Salvador Tróchez García, Daniel Umanzor Zavala, Arnulfo Jonathan Caballero, Everaldo Figueroa Territex (mexicano) y el excapitán de Policía, José Javier Contreras Hernández, alias “Diablo Contreras”.
Todos son acusados por asociación ilícita y supuestos trabajadores de los hermanos Valle. En el caso de los mexicanos se investiga su integración en el cartel de Sinaloa.
Entre los vinculados a los hermanos Valle también se encuentran detenidas Karla Sinaí Ulloa, arrestada junto a Gumaru y para quien se habilitó una celda especial, ya que no podía estar en el mismo lugar que los varones, y ahora se encuentra acompañada de Marlen Amaya, esposa de Inocente Valle.
En ese reclusorio en escala también permanece recluido Edwin Humberto, o Dany Danilo Díaz López, alias “Scrapy”, cabecilla de la Mara 18, sentenciado por la masacre en una zapatería de SPS y acusado de haber ordenado los asesinatos de varios niños.
