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Pedro Atala: 'Los tiempos de Dios son perfectos”

21.05.2017

Tegucigalpa, Honduras
Pedro Atala
es el aficionado de Motagua más feliz en este momento. El mandatario está a 90 minutos de volver a ganar una copa más con el Ciclón. “Cada gol lo celebré con todo”, dijo Atala, quien sueña con dar la vuelta olímpica el domingo 28 en el Estadio Nacional.

¿Se imaginó un 4-1 a favor en el primer partido?

Es un tremendo resultado que nos pone a las puertas de una nueva copa que estará en la vitrina de la familia motagüense. Estamos agradecidos con Dios por ese magnífico marcador, pero faltan 90 minutos. El factor clave fue la planificación durante la semana.

¿Cuánto influyó el error de Sandro Cárcamo?

Ese primer gol fue inesperado. Es la réplica de lo que pasó en el 2015. Aquella vez Licona falló en una salida y nos anotaron el gol. Esta vez Marco Vega aprovechó la jugada y anotó un buen gol.

¿La venganza es dulce?

Esa palabra venganza no entra en el lenguaje del fútbol, las revanchas sí existen en el deporte. Lo que te puedo decir es que los tiempos de Dios son perfectos y hoy se hizo justicia. Hace tres torneos perdimos una final en ese mismo estadio que no debimos haber perdido. Hoy sacamos un gran resultado ahí mismo.

¿Cree que la campaña de lástima del Honduras influyó en su contra?

Esa pregunta es para ellos. La semana pasada era para Honduras y Motagua se llamó al silencio. Nosotros tenemos que cerrar bien nuestra semana y la fórmula no la vamos a cambiar.

¿Ya se sienten bicampeones?

La verdad es que esto no ha terminado. La confianza es el peor enemigo del ser humano. Sea lo que sea lo tenemos que terminar bien. En nuestra mente y la mente del cuerpo técnico esto no ha terminado. Vamos 0-0 el domingo entrante.

Hay que manejarlo así porque este equipo le metió seis goles a Olimpia en dos partidos. Ellos tienen un fútbol alegre.

Wilmer Cruz dijo que ya están liquidados. ¿Qué piensa usted?

Wilmer es un excelente entrenador, amigo personal, le tengo mucho cariño y astutamente salió diciendo eso para sentirnos triunfalistas a más no poder. No podemos confiarnos...

¿Fue un acierto total la estrategia de Diego Vazquez?

Diego supo controlar al Honduras y la efectividad de nuestros jugadores fue total, la delantera anduvo fina. Marco Vega, partidazo, Erick Andino desbordó, el Chino Discua no tuvo su mejor noche, pero llegó puntual a anotar. En el segundo tiempo atacamos con contragolpes y anotamos los goles. Falta para que celebremos...

¿Diego Vazquez le devolvió la mística a Motagua?

Cuando le propuse a la directiva traer a Diego era una lotería como entrenador novato, pero mi argumento era su estrella de ganador. Ha sido un triunfador como futbolista ganando cinco copas.

Siempre supe que tenía buena vibra desde el día uno hasta hoy y gracias a Dios le dio un toque histórico al equipo. Muchos no creían en él, pero estamos a las puertas del bicampeonato y la Copa 15.

¿Recuerda otra final en la que Motagua haya ganado con tanta solvencia el juego de ida?

La de 1997-98 el 3-0 que le metimos al Real España en San Pedro Sula y solo llegamos a rematar en Tegucigalpa con goles de Amado Guevara y Pancho Ramírez.

¿Pasará una semana feliz organizando el juego de vuelta de la final?

La misma semana de toda la temporada, no hay nada nuevo ni nada que inventar. Motagua a pesar de haber perdido a Fonseca, Vergara y Rubilio se unió más que nunca con limitantes en los cambios, pero se fortalecieron y es cuando mejor jugó.

Edwin Pavón dijo que Motagua es el mejor equipo de Honduras desde hace cinco años ¿lo cree así?

Muy halagado por lo que dijo Pavón, un técnico exitoso. No podemos sentirnos menos que eso. Pavón clasificó a un Mundial de Clubes. Esas palabras nos comprometen a trabajar más.

¿A quién le dedicará el bicampeonato si lo gana?

Los jugadores, cuerpo técnico y todos se lo vamos a dedicar a Santiago Vergara. Creemos en los milagros y estamos invirtiendo y apoyando por la salud de Santi. Hay un porcentaje importante de la taquilla del domingo que irá destinada a la recuperación de Santiago.

Además, te informo que en poco tiempo Santi se va para España para continuar su tratamiento. Te repito, los tiempos de Dios son perfectos...