Tegucigalpa, Honduras
El fútbol hondureño está de luto. La algarabía que provocó en los motagüenses el bicampeonato del Mimado de la afición y la obtención de la copa 15, tras ganarle 7-1 en el global a su rival Honduras de El Progreso, se convirtió en tragedia al confirmarse la muerte de al menos cinco aficionados que perecieron mientras intentaban ingresar al estadio Nacional de Tegucigalpa a disfrutar del encuentro deportivo.
El caos se desató específicamente afuera del portón 11 del sector sol del estadio Nacional, alrededor de las 3:30 de la tarde.
Cuando faltaba media hora para que iniciara el juego de la Gran Final, cientos de aficionados se aglomeraron en el acceso del recinto deportivo señalado en sus boletos. Como solo quedaban pocos minutos para ubicarse en las graderías, algunos empezaron a empujarse con la intención de acelerar la marcha.
En la fila estaban presentes niños, jóvenes, adultos y ancianos. En el lugar no hacían falta los dimes y diretes entre aficionados, portoneros y autoridades.
La peor parte sucedió cuando Carlos Torres y Olman Cálix -las dos primera víctimas- perecieron por asfixia en plena vía pública. Sus cadáveres fueron embolsados ante los gritos y sollozos de sus familiares.
El zafarrancho no terminó ahí. Ante la incontrolable escena miembros de la Policía Nacional recurrieron al uso de tanquetas con agua, para sofocar a la multitud. Con el lanzamiento de potentes chorros los aficionados aglomerados en el portón 11 empezaron a disiparse.
En esos instantes autoridades de Copeco procedieron a sacar de las desordenadas filas a varios niños que estaban desesperados porque no localizaban a sus padres.
Según un video captado por EL HERALDO la desesperación fue uno de los desencadenantes de la tragedia.
Mientras algunos intentaban escapar para no ser aplastados, mujeres, niños y hasta ancianos se fueron de encuentro en la trifulca. Los equipos de rescate confirmaron que al menos 25 personas resultaron lesionadas.
El fútbol hondureño está de luto. La algarabía que provocó en los motagüenses el bicampeonato del Mimado de la afición y la obtención de la copa 15, tras ganarle 7-1 en el global a su rival Honduras de El Progreso, se convirtió en tragedia al confirmarse la muerte de al menos cinco aficionados que perecieron mientras intentaban ingresar al estadio Nacional de Tegucigalpa a disfrutar del encuentro deportivo.
El caos se desató específicamente afuera del portón 11 del sector sol del estadio Nacional, alrededor de las 3:30 de la tarde.
Cuando faltaba media hora para que iniciara el juego de la Gran Final, cientos de aficionados se aglomeraron en el acceso del recinto deportivo señalado en sus boletos. Como solo quedaban pocos minutos para ubicarse en las graderías, algunos empezaron a empujarse con la intención de acelerar la marcha.
En la fila estaban presentes niños, jóvenes, adultos y ancianos. En el lugar no hacían falta los dimes y diretes entre aficionados, portoneros y autoridades.
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Unas 200 personasformaron parte de la avalancha que enlutó a unas cuatro familias hondureñas. |
La peor parte sucedió cuando Carlos Torres y Olman Cálix -las dos primera víctimas- perecieron por asfixia en plena vía pública. Sus cadáveres fueron embolsados ante los gritos y sollozos de sus familiares.
El zafarrancho no terminó ahí. Ante la incontrolable escena miembros de la Policía Nacional recurrieron al uso de tanquetas con agua, para sofocar a la multitud. Con el lanzamiento de potentes chorros los aficionados aglomerados en el portón 11 empezaron a disiparse.
En esos instantes autoridades de Copeco procedieron a sacar de las desordenadas filas a varios niños que estaban desesperados porque no localizaban a sus padres.
Según un video captado por EL HERALDO la desesperación fue uno de los desencadenantes de la tragedia.
Mientras algunos intentaban escapar para no ser aplastados, mujeres, niños y hasta ancianos se fueron de encuentro en la trifulca. Los equipos de rescate confirmaron que al menos 25 personas resultaron lesionadas.
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Hasta el momento solo se ha confirmado la identidad de tres víctimas: Carlos Alonso Torres Mendoza (58); Olman Antenor Cálix Domínguez; y José Vidal Zúniga Espinoza (56).
Además: ¿Por qué no se canceló la final ante la muerte de cinco aficionados?
