El 2017 será recordado como un año gris para la legión azul y blanco. Nuestros embajadores apenas lograron algunos méritos individuales.
El primer torneo de Anthony Lozano con el Barcelona B fue regular ya que no pudo convertirse en titularísimo con el equipo culé. El Choco jugó solo 992 minutos en 16 partidos y anotó 4 goles, una cantidad baja para el Catracho que llegó con buenas referencias después de marcar 20 dianas con el Tenerife.
Jona Mejía vive otra realidad en el Córdoba. El delantero se encuentra en la zona de peligro en el ascenso español. No obstante, jugó más que Lozano. Un total de 17 partidos y 1,026 minutos concretando 3 dianas.
El hondureño que jugó menos en España fue Bryan Acosta, ya que apenas disputó su primera temporada en el fútbol europeo.
El volante de contención del Tenerife hizo 12 partidos, 756 minutos y marcó un gol en la Copa del Rey. Otro Catracho en Europa es Alfredo Mejía, mediocampista del Xanthi FC. El barbado Mejía no tuvo un buen año en Grecia porque solamente ha jugado 809 minutos, apareciendo únicamente en 12 compromisos. El Xanthi sigue oscilando en la tabla media de la Súper Liga.
Al lateral Emilio Izaguirre le fue bien en su primer año en el fútbol asiático. Milo se consolidó en Arabia Saudita con el Al Feiha, con quienes superó los mil minutos. Izaguirre fue titular en 11 de los 12 juegos que disputó. El zurdo tiene contrato con los árabes para el siguiente año.
En México el defensor Brayan Beckeles continuará ligado al Necaxa. El lateral derecho es muy querido con los Rayos, con quienes jugará su cuarto campeonato consecutivo. Beckeles sumó 1,337 minutos en 15 duelos en la Liga MX. El hondureño contabiliza 67 encuentros con los Hidrorrayos.
Los que la pasaron mal
Rigoberto Rivas no pudo consolidarse en el Inter reservas y fue enviado al Brescia, donde su bajo nivel lo mandaron a la banca de suplentes. Lleva un mes sin jugar. En Costa Rica el delantero Jerry Bengtson tuvo un torneo bastante pobre con el Saprissa. Bengtson marcó 3 goles en 17 partidos.
Andy Nájar fue el legionario que menos jugó. El volante pasó lesionado toda la temporada y solo jugó 55 minutos en el 2017. Cada vez que El Fenómeno Nájar jugó recayó de su lesión en la pierna y nunca pudo jugar un partido completo.
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