Argentina
Más poderosa que una defensa entera, una rebelde pubalgia fue la que dejará al goleador de Argentina Lionel Messi fuera del partido con Venezuela el martes en Mérida, por la octava fecha de la Clasificatoria Sudamericana al Mundial Rusia-2018.
'Lamentablemente no va a poder jugar. No podemos tomar riesgos. Hablamos con el médico y es lo aconsejable. Se tiene que empezar a tratar. Hay que cuidarlo', dijo Bauza en breve rueda de prensa en la puerta del predio deportivo de Ezeiza (al sur de Buenos Aires) donde se concentra la albiceleste.
La pubalgia es una inflación de músculos en la zona inguinal. En otras oportunidades el cañonero había sufrido el síntoma y esta vez los médicos y el cuerpo técnicos prefirieron preservarlo de un eventual agravamiento.
Messi entró a la cancha la noche del jueves ante Uruguay en Mendoza (oeste) con el dolor en el pubis. Marcó el gol de la victoria (1-0) que llevó a Argentina a liderar la tabla, pero salió del campo todavía afectado.
El artillero fue la figura y ovacionado por la multitud. Fue la manera de rendirle homenaje en su regreso al equipo sin haberse sacado nunca la camiseta pese a su renuncia el 26 de junio en Nueva Jersey (EEUU), tras perder, con gran desilusión, la final de la Copa América Centenario ante Chile, en desempate a penales.
Al margen de la baja de Messi 'no hay otros lesionados', dijo Bauza. Argentina viajará el domingo en un vuelo chárter con rumbo a Mérida tras haber recibido este viernes la autorización para el plan de vuelo, revelaron fuentes de la Selección citadas por el canal TyC Sports.
Lo sospechaba
El atacante 'padece un cuadro de dolor inguinocrural, por lo que no participará en el próximo compromiso de eliminatorias', indicó la Asociación del Fútbol Argentino (AFA) en un comunicado.
El parte oficial indicó que este viernes se le ha realizado al jugador 'tratamiento médico y kinésico'. 'Seguirá con indicación de reposo deportivo', se añadió.
'No sé si voy a jugar (con Venezuela), me duele', había declarado después del partido el jueves el máximo artillero histórico de la Selección con 56 anotaciones. Hizo un esfuerzo pero no lo podía continuar sin poner en peligro su estado físico.
Messi es un jugador clave desde todo punto de vista para el equipo argentino. La albiceleste lidera la serie sudamericana con 14 puntos, uno más que Uruguay, Colombia y Ecuador. Venezuela cierra las posiciones con solo un punto.
Antes de viajar a Buenos Aires con miras al encuentro con Uruguay, el departamento médico del FC Barcelona de España, donde juega, había reportado que sufría una molestia en al abductor del muslo izquierdo. Pero ese músculo no le trajo problemas.
Malditas pubalgias
Messi 'entró dolorido y así salió. Pero lo pudo soportar por su coraje', había señalado el 'Patón' Bauza en la rueda de prensa tras el encuentro en el estadio mendocino Malvinas Argentinas.
'Sé lo que es padecer una pubalgia. Pero la personalidad de Messi hace que se quede en la cancha. Ahora hay que esperar que se desinflame la zona, con descanso y medicación', dijo Bauza.
La dolencia es frecuente entre algunos deportistas de alta competición. En el fútbol, una pubalgia crónica y agravada puede obligar a un jugador a retirarse, aunque suele suceder en los más veteranos.
Más poderosa que una defensa entera, una rebelde pubalgia fue la que dejará al goleador de Argentina Lionel Messi fuera del partido con Venezuela el martes en Mérida, por la octava fecha de la Clasificatoria Sudamericana al Mundial Rusia-2018.
'Lamentablemente no va a poder jugar. No podemos tomar riesgos. Hablamos con el médico y es lo aconsejable. Se tiene que empezar a tratar. Hay que cuidarlo', dijo Bauza en breve rueda de prensa en la puerta del predio deportivo de Ezeiza (al sur de Buenos Aires) donde se concentra la albiceleste.
La pubalgia es una inflación de músculos en la zona inguinal. En otras oportunidades el cañonero había sufrido el síntoma y esta vez los médicos y el cuerpo técnicos prefirieron preservarlo de un eventual agravamiento.
Messi entró a la cancha la noche del jueves ante Uruguay en Mendoza (oeste) con el dolor en el pubis. Marcó el gol de la victoria (1-0) que llevó a Argentina a liderar la tabla, pero salió del campo todavía afectado.
El artillero fue la figura y ovacionado por la multitud. Fue la manera de rendirle homenaje en su regreso al equipo sin haberse sacado nunca la camiseta pese a su renuncia el 26 de junio en Nueva Jersey (EEUU), tras perder, con gran desilusión, la final de la Copa América Centenario ante Chile, en desempate a penales.
Al margen de la baja de Messi 'no hay otros lesionados', dijo Bauza. Argentina viajará el domingo en un vuelo chárter con rumbo a Mérida tras haber recibido este viernes la autorización para el plan de vuelo, revelaron fuentes de la Selección citadas por el canal TyC Sports.
Lo sospechaba
El atacante 'padece un cuadro de dolor inguinocrural, por lo que no participará en el próximo compromiso de eliminatorias', indicó la Asociación del Fútbol Argentino (AFA) en un comunicado.
El parte oficial indicó que este viernes se le ha realizado al jugador 'tratamiento médico y kinésico'. 'Seguirá con indicación de reposo deportivo', se añadió.
'No sé si voy a jugar (con Venezuela), me duele', había declarado después del partido el jueves el máximo artillero histórico de la Selección con 56 anotaciones. Hizo un esfuerzo pero no lo podía continuar sin poner en peligro su estado físico.
Messi es un jugador clave desde todo punto de vista para el equipo argentino. La albiceleste lidera la serie sudamericana con 14 puntos, uno más que Uruguay, Colombia y Ecuador. Venezuela cierra las posiciones con solo un punto.
Antes de viajar a Buenos Aires con miras al encuentro con Uruguay, el departamento médico del FC Barcelona de España, donde juega, había reportado que sufría una molestia en al abductor del muslo izquierdo. Pero ese músculo no le trajo problemas.
Malditas pubalgias
Messi 'entró dolorido y así salió. Pero lo pudo soportar por su coraje', había señalado el 'Patón' Bauza en la rueda de prensa tras el encuentro en el estadio mendocino Malvinas Argentinas.
'Sé lo que es padecer una pubalgia. Pero la personalidad de Messi hace que se quede en la cancha. Ahora hay que esperar que se desinflame la zona, con descanso y medicación', dijo Bauza.
La dolencia es frecuente entre algunos deportistas de alta competición. En el fútbol, una pubalgia crónica y agravada puede obligar a un jugador a retirarse, aunque suele suceder en los más veteranos.