Tegucigalpa, Honduras
Autoridades del Registro Nacional de las Personas (RNP) estiman que unos 200 mil hondureños que ya fallecieron aparecen en el Censo Nacional Electoral porque sus familiares no se han acercado a tramitar las correspondientes defunciones como lo ordena la ley de esta institución.
Esta cifra la calcula el RNP tomando como base un promedio mensual que hace el Instituto Nacional de Estadísticas (INE), pero no es una cifra exacta. Según cifras del RNP, entre 1996 y 2006 un total de 217,672 defunciones fueron tramitadas en esa institución, a las que se suman otras 260,182 notificadas entre 2007 y 2016.
Entre estos dos períodos (21 años), las defunciones suman 477,854. Para el subdirector técnico del RNP, Gerardo Martínez, una cosa es que los familiares no hayan tramitado sus defunciones y otra es que los muertos puedan ejercer el sufragio porque no hay forma de hacerlo.
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Este funcionario reconoce que mientras no se apruebe una nueva tarjeta de identidad será difícil sacar del censo a los fallecidos, a menos que sus familiares se acerquen a tramitar este documento, que en muchos casos sirve a los descendientes para gestionar herencias.
En Honduras no existe una cultura del registro de forma que mucha gente no se preocupa por registrar los nacimientos, mucho menos por notificar un fallecimiento.
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Sin embargo, las autoridades del RNP informaron que de ahora en adelante coordinarán con Medicina Forense y con los hospitales públicos y privados para que por su cuenta hagan las defunciones con el auxilio de formatos que les serán distribuidos. No explicaron por qué no lo han hecho.
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La Alianza de oposición denunció que más de un millón de hondureños fallecidos siguen “vivitos” en el censo, pero el subdirector del RNP considera que si esta cifra fuera cierta por lo menos la mitad de los que nacen morirían cada año.
La denuncia hecha por la Alianza fue compartida por el candidato presidencial del Partido Liberal, Luis Zelaya, quien considera que las cifras deben investigarse. Dijo conocer el testimonio de un inmigrante hondureño que vive en Estados Unidos quien le confesó que aparece “votando” en las elecciones primarias, pero curiosamente ese día 12 de marzo el votante se encontraba fuera del país
