La cantante Katy Perry sorprendió en la entrega de los premios Grammy luego que se mantuviera alejada de los escenarios por poco más de un año.
Y ante esto la novia del actor Orlando Bloom fue cuestionada por los diferentes medios durante su paso por la alfombra roja, quien no fue de las mejores vestidas este año.
La respuesta de la intérprete de “Chained to the rithym” fue por su salud mental y además añadió: 'Y me ha ido genial. ¡Aún no me he rapado la cabeza!', esto dejó a muchos con la boca abierta al recordar los momentos de crisis que sufrió Britney Spears en 2007.
Agregó, mientras sonreía de una forma picaresca, “estoy preparada y tampoco estoy muy lejos de que me suceda'.
Spears no ha hecho ningún comentario al respecto por lo que Katy hizo previo a la gala de premios.