Sus jóvenes maestros, que están convencidos de que los estudiantes que dedican más tiempo al arte alcanzan mayores logros en el resto de sus materias, disfrutan cada cátedra como si fuera la primera vez que la imparten. Las sonrisas delatan los frutos que han conseguido todos los involucrados.
El camino y gestión de “Génesis Comunidad de las Artes” han sido complicados, llenos a veces de incertidumbres y altibajos, pero ricos y largos en experiencias.
El proyecto artístico que actualmente une a hondureños, guatemaltecos y canadienses inició en 2011 en Copán Ruinas, zona occidental de Honduras. El voluntariado social del artista Duane A. Forrest, originario de Canadá, puso en marcha un programa piloto que brindó a niños y jóvenes la oportunidad de recibir clases gratuitas de guitarra, dibujo, pintura, danza y cocina. A cargo de trasladar el conocimiento estaban jóvenes artistas, unos empíricos y otros académicos, que siguieron adelante a pesar de los pocos recursos económicos. Los pioneros fueron José David Reyes, Kenny Molina y Giselle Rodríguez.
 |
En 2016, el proyecto también abrió su sede en la zona norte de Honduras, específicamente en Choloma, Cortés. Ahí los maestros de música Jimmy Murcia, Aura Mariela Platero, Carlos Alberto Morales y Deuel Abidan Morales, impartieron clases de piano, guitarra, canto e iniciación musical. En 2018, los últimos tres continúan desarrollando las habilidades artísticas de mas de 80 niños, la mayoría provenientes de escuelas públicas.
Los fondos para que el proyecto artístico continúe al pie de la bandera, aún siete años después de su fundación, provienen de conciertos y campañas de recaudación que organiza Forrest. El ideal de todos los involucrados es constituirse Organización No Gubernamental (ONG) para gestionar ayudas económicas. En Canadá ya se culminó el proceso legal, sin embargo en Honduras ha sido una lucha que hasta en febrero de 2018 se tornó esperanzadora.
Vea: Ellos son los máximos exponentes de música cristiana en Centroamérica
 |
Mas allá de las aulas
Las clases que imparten los seis maestros que conforman “Génesis Comunidad de las Artes”, a nivel nacional, son solo el comienzo. Después de abandonar los salones, los instructores dialogan con los padres de familia y ofrecen charlas motivacionales.
La relación con las familias de los niños y jóvenes que forman parte del proyecto es cercana y fluida. Los maestros no solo conocen a los niños, sino a todos los involucrados con ellos. El trato prácticamente es especializado y los menores aprovechan al máximo cada segundo.
Para seguir sumando experiencias crearon un programa denominado “Joven líder”, la iniciativa incorpora a los alumnos más destacados para que se conviertan en asistentes y apoyos de los maestros. Actualmente dos alumnas de piano y uno de guitarra enseñan sus conocimientos artísticos a otros compañeros que apenas descubren la oportunidad de ejecutar un instrumento. El coordinador de proyecto y presidente de la junta directiva, Deuel Morales, manifestó que el objetivo es “crear un semillero de talentos para dejar relevos”.
A largo plazo los involucrados sueñan con formar una orquesta de guitarra, una sinfónica y un coro. Además, brindar oportunidades académicas a través de becas artísticas.
 |
Retos
“Génesis Comunidad de las Artes”, a primera vista, parte de algunas desventajas. Al no contar aún con personería jurídica, suele tener carencias de instalaciones y materiales.
En Choloma, por ejemplo, necesitan más guitarras y pianos: la necesidad es tanta que hay 12 alumnos y solo un instrumento por cada cuatro estudiantes. Frente a las dificultades, los maestros agudizan el ingenio, incluso consiguen prestados algunos instrumentos. Para ellos, que iniciaron a dar clases como voluntarios, la formación constante, a pesar de las carencias, es la principal misión.
Aparte de generar nuevos espacios artísticos a un país que tanto lo necesita, el propósito del proyecto es también darle oportunidad de empleo a músicos empíricos, que alejados de una formalidad académica no han logrado exprimir al máximo su talento y conocimientos.
A quienes deseen apoyarlos, los involucrados les piden sobre todo dos cosas: un pacto leal para rescatar el presente artístico de Honduras y un compromiso inquebrantable con el futuro de la naci?n, la juventud.
Así los encuentras en Facebook: Genesis Community of the Arts
