TEGUCIGALPA, HONDURAS.- Con el fin de socializar el proyecto de ferrocarril interoceánico en Honduras y dialogar temas de cooperación, el secretario privado, Héctor Zelaya y el canciller Enrique Reina recibió la visita del embajador de Kuwait, Salah Suleiman Al-Haddad.
Zelaya informó que en la socialización del proyecto se resaltó los beneficios que aportará al comercio mundial, en especial al país árabe.
“Este proyecto no solo transformará nuestra región, sino que también ofrecerá nuevas oportunidades para mejorar la conexión y eficiencia del transporte global”, publicó el también hijo de la presidenta Xiomara Castro.
De acuerdo a lo informado por Zelaya, el embajador mostró gran “interés y se sintió inspirado” por las posibilidades que abre este proyecto a los países árabes.
Recientemente, el canciller Reina juramentó a Francisco Herrera, exrector de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH), como el nuevo embajador de Honduras en Kuwait.
Las relaciones diplomáticas entre Honduras y Kuwait ya manejan acuerdos de cooperación en áreas como agricultura, por lo que el gobierno espera seguir fortaleciendo la diplomacia con el nombramiento del nuevo embajador.
De 10 a 15 años llevará a cabo construcción de tren interoceánico
Fue el propio Héctor Zelaya, en entrevistas anteriores, quien dijo que ya tienen los estudios de factibilidad de gobiernos pasados, mismos que servirán de insumo.
“Estamos actualizando todos esos estudios y se va a empezar este próximo año (este 2024) para empezar a hacer la conformación legal de un proyecto, conformación de los equipos de trabajo”.
A su vez, Zelaya indicó que el proyecto prevé estar bajo la administración de varios gobiernos.
“El proyecto es de 10 a 15 años, un proyecto multimillonario donde se obtenga el financiamiento, la propuesta de nosotros es crear una empresa estatal”.
Se prevé que el tren interoceánico sirva de paso para cargueros con capacidad mayor a las 300 mil toneladas, así como el paso de 10 mil contenedores en 24 horas.
A su vez, las líneas ferroviarias rondarían los 440 kilómetros lineales por 250 kilómetros de ancho.
Entidades financieras como el Banco Centroamericano de Integración Económica (BCIE) ya ha puesto a disponibilidad del gobierno $200 millones para estudios del diseño conceptual y prefactibilidad técnico-financiera; así como impacto ambiental y gestión de riesgo.
