Hondureños en el Mundo

Hondureños en Miami en zozobra por nueva política

10.08.2017

Tegucigalpa, Honduras
Una de las ciudades que alberga mayor número de indocumentados en Estados Unidos dejó de ser un “santuario” para someterse a las políticas migratorias del presidente Donald Trump.

Se trata de Miami Dade, un condado que pertenece al estado de Florida y que alberga unos 650 mil inmigrantes, entre ellos aproximadamente 70 mil hondureños, que ahora se encuentran en zozobra ante la posibilidad de que cualquier policía del condado pueda retenerlos e indagar sobre su historial migratorio.

El lunes anterior, Carlos Giménez, alcalde de Miami Dade, anunció que recibió la confirmación de que la ciudad dejaría de ser “amigable con los inmigrantes” para no perder los fondos que recibe del Departamento de Justicia, destinados a la seguridad pública.

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“Ahora la policía de Miami Dade puede detener a las persona indocumentadas, los llevan a un centro y les ponen un hold de inmigración (le da información al Servicio de Inmigración y Control de Aduanas de los Estados Unidos, ICE)”, explicó Francisco Portillo, presidente de la organización Francisco Morazán en Miami, Florida.

También, la policía ahora podrá ampliar el tiempo de detención de los inmigrantes hasta que ICE sea notificada y posteriormente retenga a las personas para someterlas a una deportación o que pasen a una cárcel federal si cometieron algún delito.

Miami Dade es la primera ciudad “santuario” que accede a aplicar las políticas antinmigrantes del gobierno de Estados Unidos. Ante esta situación, varias organizaciones promigrantes de Honduras ya han realizado protestas frente a la alcaldía del condado para exigir que no se aplique la orden.

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Ciudades Santuario
En el país norteamericano, las ciudades de San Francisco, Denver, Los Ángeles, Chicago, Houston, Detroit, Nueva York, Filadelfia y Washington son consideradas “santuario”.

Esto significa que cuando un inmigrante es detenido por la policía no se le consulta sobre su estatus migratorio. Asimismo, los fondos de estas ciudades no son utilizados para reforzar las leyes de inmigración.