Desde Santa Marta a Piedra Parada, por Papalón y el Hato, la comunidad de San Miguelito llora y sufre la pérdida de de sus hijos.
Y es que padres, madres y hermanos salieron de sus casas, sin imaginar que era la última vez que verían su tierra.
Familias completas se movilizan de una vela a otra, pues como en todos pueblo la gente se conoce bien.
Apartado en El Papalote, doña Leonor Villalta se aferra al cajón donde descansa su esposo Rogelio Munguía (72), y como no, si fueron 45 años de casado y 11 hijos en una vida de trabajo y amor de esposos.
'Era la cabeza del hogar, muy trabajador, recto'.
+¿Qué fue lo que provocó la tragedia?
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Con lágrimas en sus ojos doña Leonor relató los minutos de dolor al ver por la televisión el accidente: 'las cipotas lo vieron, en la tele, pero teníamos fé que estuviera vivo' comentó.
Y es que don Rogelio venía de tegucigalpa tras estar un par de días en Potrerillos donde fue a ver unos apartamentos.
'Mis hijos vienen de Canadá y duele tener que reunirnos así'.
+Relato de sobreviviente:'Solo escuchaba a los niños pedir ayuda'
24personas muertas era elnúmero de víctimas del accidente hasta el mediodía de este lunes. |
Su esposa no contiene las lágrimas y afirma que ahora no sabe que hacer para cuidar a su pequeña.
Él 'solo estaba esperando el pago del martes para dejar el trabajo pues ya no quería trabajar (en el bus)', dijo su ahora viuda.
'Él solo se despidió de la niña y le dijo que la quería, no me imaginé que ese día se me moría', afirma su madre para quien solo Dios ha podido secar sus lágrimas, y afirma que su hijo vivirá para siempre en su corazón.
La joven muchacha recuerda como le comentó a su esposo del presentimiento que algo malo podía pasar 'le dije y si falla el bus, y solo me dijo como te pones a creer si está bien revisado'.
El joven cobrador deja una pequeña de 14 meses en manos de su madre que tendrá que enfrentarse a la lucha sola.
+Ver aquí la lista de los fallecidos tras la tragedia en salida al sur
'Hija me quiero regresar al pueblo'. Así se despidió Gloria Bardales de su hija el pasado domingo antes de abordar el autobús.Momentos después su hija Vilma sentía morir una parte de su corazón cuando se enteró por las noticias que el autobús había sido embestido.
'No me imaginé que era ella', dice la muchacha mientras rompe en llanto. Ella es originaria de la aldea la Montañita de Alubarén.
+'Decidí no viajar por eso estoy vivo'
Otro triste relato es el de una madre que perdió a su hijo.
'Máma, espéreme que voy para la casa'. Armando Matamoros, primo del alcalde de San Miguelito, hizo esa promesa a su madre sin saber que no la cumpliría.
La última vez que vio a su madre fue hace ocho días con la esperanza de mirarla nuevamente. 'Era tan cariñoso conmigo, me levantaba en sus brazos y me besaba. Ayer me quedé esperándolo ya no logró llegar mi muchacho'. En Tegucigalpa Armando se desempeñaba como motorista.
Los entierros en las comunidades aún no han empezado, pero se espera una afluencia masiva.
El accidente que cobró la vida de al menos 24 personas se registró en el kilómetro 9 de la salida al sur el pasado domingo, cuando una rastra embistió a un bus interurbano.
+Imágenes de la tragedia que enluta a San Miguelito
