El temor de los vecinos del proyecto habitacional Ciudad del Ángel de perder hogar pasó de ser un pensamiento para convertirse en una realidad.
Ayer, producto de una falla geológica que cruza por el sector, unas cuatro viviendas de este exclusivo complejo habitacional se derrumbaron luego de un efecto cascada ante la vista perpleja de sus propietarios.
Es importante mencionar que aunque solo hay cuatro viviendas destruidas, las grietas producto del fallamiento cruzan la totalidad del proyecto.
Esta condición ha generado pánico en el sector, pues se estima que el terreno sobre el que se construyeron unas 180 casas es inestable.
Según el relato de los vecinos, las fallas se reactivaron con fuerza desde el fin de semana, situación por la que decenas de familias abandonaron sus inmuebles.
El problema
Emocionados con la idea de adquirir una vivienda nueva, Lucinda Navarro y su familia compraron una casa en este proyecto habitacional, lo que nunca imaginaron es que esta decisión se iba a convertir en su peor pesadilla.
Al paso de varios meses, las paredes presentaron varias rajaduras, el piso de cerámica se comenzó a levantar, las puertas se desplomaron y las calles vehiculares presentaron severas grietas.
A esta lista de problemas se sumaron las constantes filtraciones de agua, fallas en los sistemas eléctricos y enorme contaminación producto de fugas de aguas negras.
Estas incomodidades obligaron a los vecinos a presentar sus reclamos a los propietarios de la sociedad mercantil denominada Bienes y Raíces Arias, de origen guatemalteco, quienes fueron los encargados de ejecutar la obra.
Empero, los años pasaron y hoy los vecinos se han visto obligados a abandonar sus hogares para evitar una tragedia de mayores proporciones.
A la hora del derrumbe, doña Lucinda Navarro lamentó la situación, al tiempo que se dedicaba a levantar una lista de los vecinos que aún quedaban en sus hogares.
Asistencia
Apenas unos minutos luego del desastre se hizo presente al lugar el titular de la Comisión
Permanente de Contingencias (Copeco), Lisandro Rosales, en compañía del personal técnico de la institución.
Luego de realizar varias inspecciones en diferentes puntos el funcionario llegó a la conclusión de que el proyecto debe de ser deshabitado de forma inmediata.
“Este es un problema al que le hemos dado seguimiento hace más de un año, de 200 viviendas que hay solo 180 familias se encuentran en el sector”, indicó.
Agregó que la mayoría de las casas presentan un levado índice de afectación producto de la falla geológica que existe, en vista de que el terreno no es apto para ningún tipo de construcción.
“Este proyecto es inhabitable, para estabilizar el suelo hay que construir obras de mitigación que podrían triplicar el costo total de la urbanización”, expresó.
Rosales recomendó una evacuación inmediata de la población, al tiempo que aseguró que se evaluarán los problemas que hay en cada casa.
“Hay cuatro viviendas caídas, pero todos los inmuebles tienen severos daños”, apuntó.
