Contrario a la percepción general, la destacada abogada en temas de inmigración, Jessica Domínguez, aseguró que una persona que haya sido deportada de Estados Unidos sí puede solicitar una visa de turista para regresar a ese país.
Sin embargo, la apoderada legal explicó que tener un antecedente de deportación puede ser tomado como evidencia negativa por parte del oficial consular que realiza la entrevista para aprobar este tipo de visa, por lo que las probabilidades de rechazo aumentan.
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Asimismo, la especialista dio un tip de tres preguntas que los oficiales consulares o de las embajadas reflexionan de forma individual para analizar el riesgo que el solicitante del documento viole las leyes migratorias.
Una de esas interrogantes es: ¿Se va a ir a quedar la persona a los Estados Unidos de forma ilegal? Debido a que la mitad de los 11 millones de migrantes entraron legalmente y decidieron quedarse violentando la prohibición.
Asimismo, la profesional dijo que los oficiales de la embajada analizan la evidencia que muestra el solicitante para justificar que tiene muchos enlaces en su país de origen, como ser las propiedades, su profesión, entre otras.
Además, la experta en temas migratorios detalló que el encargado de extender la visa se pregunta normalmente: ¿Qué evidencia negativa tiene el solicitante?
Esta interrogante ayuda a responder si la persona ya ha sido deportada, lo cual es evidencia negativa y puede incidir en la negación de la visa.
