Desde el comienzo de la era de Donald Trump en el gobierno estadounidense los inmigrantes han vivido bajo las sombras para evitar ser deportados a sus naciones de origen, principalmente por la implementación de políticas antiinmigrantes.
Esta “cacería contra inmigrantes” como lo llaman los expertos, busca que Estados Unidos quede totalmente libre de personas que han violentado las leyes y reglamentos de ese país.
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Para ello, es importante conocer cuáles son las prioridades de deportación en el mandato de Trump. Aquí le mostramos las principales:
1. Quien haya cumplido una pena por ofensa criminal, es decir, los delitos menores que representan un año o más en prisión.
2. La persona que haya sido acusada por una ofensa criminal que aún no se haya resuelto.
3. Quien haya cometido actos que sean considerados como ofensa criminal. Entre las ofensas criminales que definen las leyes federales están: la violencia doméstica, abuso sexual o explotación, escalamiento, posesión o uso ilegal de armas de fuego; distribución o tráfico de drogas y manejar bajo los efectos de alcohol o drogas.
4. El inmigrante que haya cometido fraude ante una agencia gubernamental.
5. Quien haya abusado de algún programa gubernamental de beneficios.
6. Los inmigrantes que tengan una orden de deportación y no regresaron a su país de origen.
7. Las personas, que a criterio de un oficial de inmigrante, sea un riesgo para la seguridad nacional y pública.