Tegucigalpa,Honduras
Cientos de inmigrantes protestaron frente a la Casa Blanca para pedir al presidente Barack Obama detener las deportaciones de centroamericanos que realizaría el Departamento de Seguridad Interna (DHS) en enero.
“Queremos decirle al Departamento de Seguridad y al presidente Obama que si continúan con este plan, esas familias, esos niños van a ser asesinados en sus países de origen”, dijo durante el acto Gustavo Torres, director de Casa de Maryland, organización de asistencia a los inmigrantes.
Los planes de deportación del DHS, que fueron revelados por The Washington Post la semana pasada, se concentrarían en adultos y niños sobre los que ya pesan órdenes de repatriación por parte de un juez migratorio y se realizarían a partir del próximo mes de enero.
Torres subrayó que los inmigrantes centroamericanos entran en la categoría de refugiados porque Guatemala, El Salvador y Honduras viven la peor crisis de violencia en los últimos 30 años.
“Queremos que se dé un TPS (estatus de protección temporal) a estos refugiados y que se paren las deportaciones, por eso estamos acá”, dijo en entrevista con Notimex el activista.
“En El Salvador estamos pasando por una gran crisis en la que nuestros jóvenes son torturados, secuestrados, viviendo una gran violencia, mucho derrame de sangre, por eso es tan preocupante que se ponga en marcha el plan de deportaciones masivas”, dijo a Notimex la salvadoreña Lidia Rivas.
Cientos de inmigrantes protestaron frente a la Casa Blanca para pedir al presidente Barack Obama detener las deportaciones de centroamericanos que realizaría el Departamento de Seguridad Interna (DHS) en enero.
“Queremos decirle al Departamento de Seguridad y al presidente Obama que si continúan con este plan, esas familias, esos niños van a ser asesinados en sus países de origen”, dijo durante el acto Gustavo Torres, director de Casa de Maryland, organización de asistencia a los inmigrantes.
Los planes de deportación del DHS, que fueron revelados por The Washington Post la semana pasada, se concentrarían en adultos y niños sobre los que ya pesan órdenes de repatriación por parte de un juez migratorio y se realizarían a partir del próximo mes de enero.
Torres subrayó que los inmigrantes centroamericanos entran en la categoría de refugiados porque Guatemala, El Salvador y Honduras viven la peor crisis de violencia en los últimos 30 años.
“Queremos que se dé un TPS (estatus de protección temporal) a estos refugiados y que se paren las deportaciones, por eso estamos acá”, dijo en entrevista con Notimex el activista.
“En El Salvador estamos pasando por una gran crisis en la que nuestros jóvenes son torturados, secuestrados, viviendo una gran violencia, mucho derrame de sangre, por eso es tan preocupante que se ponga en marcha el plan de deportaciones masivas”, dijo a Notimex la salvadoreña Lidia Rivas.
El Triángulo Norte de Centroamérica, conformado por Guatemala, El Salvador y Honduras, no solo es la “minirregión” más violenta del mundo, según datos del PNUD, sino que también la ONG Save the Children lo calificó como “uno de los lugares más peligrosos para ser niño” y con evidencia contundente: más de 18 mil menores que huían de la pobreza y la violencia imperantes en esos tres países fueron deportados de Estados Unidos y México el año pasado.