Limpieza de escombros y restauración de la electricidad para decenas de miles de residentes y negocios eran el foco el miércoles en gran parte del noreste de Estados Unidos, tras el azote de una tormenta que llevó nieve y vientos fuertes a la región.
Cuando falta menos de una semana para el comienzo de la primavera, la tercera tormenta grande en dos semanas sepultó algunas localidades de Nueva Inglaterra bajo dos pies (61 centímetros) de nieve el martes.
Unos 140,000 usuarios estaban sin electricidad en Massachusetts el miércoles por la mañana, mientras que Maine, Rhode Island y Connecticut lidiaban también con apagones. La empresa de electricidad National Grid, que sirve Massachusetts y Rhode Island, dijo que pudiera tomar hasta el jueves por la noche antes de que el servicio eléctrico sea restaurado totalmente.
El Servicio Nacional de Meteorología dijo que la tormenta del martes arrojó más de dos pies de nieve en ciertas localidades.
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Uxbridge, en Massachusetts, fue el que alcanzó mayos acumulación, con casi 28 pulgadas (71 centímetros). Foster, Rhode Island, tuvo más de 25 pulgadas, mientras que en Connecticut, Killingly recibió 20 pulgadas.
En Cape Cod, Massachusetts, los vientos tuvieron ráfagas de 70 mph (112 kph), dijo el servicio.
Amtrak suspendió todo el servicio de trenes el martes entre Boston y Nueva York. La compañía dijo que la mayoría del servicio entre las dos ciudades se reanudaría el miércoles.
Los viajes por carretera y avión también fueron afectados. El hielo en las carreteras causó accidentes, con al menos una muerte en Carolina del Norte. El portal de monitoreo de vuelos FlightAware reportó más de 1,500 cancelaciones. El Aeropuerto Internacional Logan, en Boston, que estuvo casi vacío el martes, reanudó operaciones el miércoles.
