Óscar Álvarez, exministro hondureño de Seguridad, mencionado por el capo del cartel los Cachiros en una corte de Nueva York, afirmó este jueves que en su administración diseñó el 'Plan Honduras' contra el narcotráfico con el apoyo del entonces presidente Porfirio Lobo.
'Usted proceda', dijo el presidente Lobo al ministro, por lo cual éste hacía planes para viajar a Colombia a lograr el apoyo de Bogotá que, más tarde, permitió la estructuración de un 'Plan Honduras' contra la narcoactividad, confió Alvarez en una entrevista a la AFP.
Alvarez, actual diputado oficialista y ministro de Seguridad en dos ocasiones (2002-2005 y 2010-2011), explicó que el Plan, apoyado por el presidente Lobo, consistía en una estructura de leyes como la extradición, combate del lavado de activos y privación de propiedades, que permitieron dar a los capos 'a donde más les duele', extraditarlos y quitarles su dinero y propiedades.
Alvarez fue mencionado en un testimonio que rindió el lunes ante un tribunal estadounidense el exjefe del cártel los Cachiros, Devis Leonel Rivera Maradiaga, sobre la presunta participación de Fabio Lobo, hijo del expresidente Porfirio Lobo (2010-2014), en una conspiración para favorecer al narcotráfico.
En su declaración ante la jueza Lorna Schofield, el capo señaló al expresidente Lobo, a su hijo, a su jefe de inteligencia y actual ministro de Seguridad, Julián Pacheco, entre otros militares, policías y diputados, de recibir sobornos del cártel para facilitar el transporte de cocaína de Colombia y Venezuela hacia Estados Unidos.
Rivera Madariaga dijo a la jueza que en la primera reunión con Porfirio Lobo en la que él participó, su 'hermano (Javier Rivera) comenzó a hablarle a Lobo para que le ayudara con el señor Oscar Alvarez, que lo ayudara porque este señor lo estaba mencionando varias veces por los medios televisivos' como narcotraficante.
Lobo rechazó el martes las acusaciones de Devis Leonel Rivera Maradiaga, considerado en algún momento el líder del cartel de 'Los Cachiros' y quien afirmó que incluso se reunió con el exmandatario.
Rivera además mencionó a varios funcionarios hondureños que supuestamente también le ofrecieron protección, entre ellos, el actual ministro de Seguridad General, Julián Pacheco.
Más tarde, desde Honduras, Pacheco se refirió en rueda de prensa a lo afirmado en Nueva York. 'Estoy a disposición que se me investigue en éste y cualquier otro señalamiento infundado, mal intencionado y promovido por un delincuente confeso', aseguró. 'Estas calumnias dañan no solo mi honorabilidad como funcionario, sino también la de mi familia y la de nuestra querida Honduras'.
Rivera, quien está detenido en Estados Unidos, hizo los señalamientos el lunes durante una audiencia del caso de Fabio Porfirio Lobo, hijo del expresidente y quien el año pasado se declaró culpable de asociación delictiva para traficar cocaína a Estados Unidos.
El narcotraficante aseguró que sobornó en varias ocasiones a Lobo y a su hijo con cantidades que en total superaron los 600,000 dólares antes y después de que se convirtiera en presidente. Los supuestos pagos ocurrieron entre 2009 y 2013.
En un momento, incluso afirmó que tuvo una reunión con Lobo y que poco después se entregó a su personal de seguridad una maleta con unos 300,000 dólares para el exmandatario.
El abogado del hijo de Lobo, Manuel Retureta, declinó el martes hablar del caso con The Associated Press.
En Honduras, Lobo negó haber recibido sobornos de 'Los Cachiros' para proteger supuestas actividades delictivas en este país en su gestión de 2010 a 2014. 'Jamás recibí dinero de esos delincuentes', aseguró a periodistas en su residencia en El Chimbo, en las afueras de esta capital.
Rivera, que colaboró con la DEA, se ha declarado culpable de varios delitos y de ordenar la muerte de 78 hondureños, entre ellos, del zar antidrogas de Honduras, Julián González en diciembre de 2009. Se entregó a Estados Unidos en 2015.
Lobo sostuvo el martes que 'mis acciones como presidente son las más claras muestras de mi compromiso con Honduras'.
En su gestión en el Congreso impulsó la Ley de Extradición mediante la cual Estados Unidos ha llevado a su territorio unos 12 hondureños a los que ha encausado por narcotráfico.
Rivera dijo que pagó el dinero al exmandatario para lograr protección y poder transportar droga de Sudamérica a Honduras y de ahí a Estados Unidos. También contó que esperaba evitar que él y su hermano fueran extraditados.
El narcotraficante también dijo que trabajó con el hijo del expresidente, Fabio, para lograr contratos con el gobierno y poder así lavar el dinero obtenido en el tráfico de drogas.
La Secretaría de Seguridad de Honduras rechazó las acusaciones el martes a través de un comunicado. 'Estas aseveraciones mal intencionadas y sin fundamento alguno lo que pretenden es mermar las acciones concretas que el Estado de Honduras realiza en contra del crimen organizado'.
Se espera que la semana que viene se celebre otra audiencia de cara a una futura sentencia en el caso del hijo del expresidente Lobo.