Tegucigalpa, Honduras
Noé Montes Bobadilla, extraditable capturado el pasado miércoles, es hermano de Adán Montes Bobadilla, uno de los principales cabecillas del cartel del Atlántico y que falleció de un paro cardiaco en noviembre de 2014.
Adán fue un escurridizo narcotraficante que se libró de la justicia hondureña en dos oportunidades.
El capo de la droga había sido capturado por primera vez el 28 de julio del 2003 en el mar Caribe a bordo de una embarcación en posesión de 432 kilos de cocaína, pero resultó favorecido con un arresto domiciliario.
En aquel entonces, Montes utilizó sus propias influencias en el sistema de justicia para ser favorecido con la medida de arresto domiciliario, luego de su captura.
Pero cinco meses más tarde, varios hombres armados irrumpieron en la vivienda donde cumplía esta medida. Montes se dio a la fuga con sus secuaces, quienes asesinaron a los dos policías penitenciarios que lo custodiaban en una casa en el barrio Jericó de Trujillo, Colón.
Días después el Poder Judicial separó de su cargo al juez que otorgó la medida de arresto domiciliario. Las autoridades consideraron que el togado fue cómplice para que el capo se fugara. El argumento utilizado en ese momento por Umaña fue que lo había mandado a su casa porque tenía que recuperarse de un disparo que habría recibido durante su captura.
Montes, utilizando todos los medios se movilizó hacía Colombia, donde fue recapturado en enero de 2007 y repatriado a Honduras, tras permanecer recluido en un centro penitenciario de máxima seguridad en la isla de San Andrés del país sudamericano.
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Al llegar al país, Montes fue enviado a una celda especial de la Penitenciaría Nacional Marco Aurelio Soto.
Allí permaneció recluido hasta noviembre de 2013 porque misteriosamente nuevamente fue favorecido por una jueza, quien le volvió a dictar la medida cautelar de arresto domiciliario.
Los Montes Bobadilla eran primos de Pedro García Montes, un hondureño que fue jefe de pagos del Cartel de Cali en Colombia.
Mientras Adán huía de la justicia su familia tomó las riendas del negocio.
Informes de la Dirección de Lucha contra el Narcotráfico indican que el clan de los Montes realizó actividades de narcotráfico con la participación de varios miembros de su familia, manteniendo relaciones con otros grupos que han operado en la zona del departamento de Colón, como ser los hermanos Rivera Maradiaga, ya en poder de la justicia de Estados Unidos y la familia Zelaya García.
Mediante la operación Titán en febrero pasado el Ministerio Público aseguró más de 40 bienes a los Montes.
El extraditable Noé Montes Bobadilla, alias “Tom”, compareció ayer en audiencia de información ante un juez natural de la Corte Suprema de Justicia (CSJ).
En la audiencia el hondureño fue informado sobre las imputaciones que le está haciendo el gobierno de Estados Unidos.
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El miércoles anterior Montes Bobadilla fue capturado en su casa de habitación, en la aldea Francia, municipio de Limón en Colón.
“Estaba trabajando cuando lo agarraron, él se dedica a la ganadería”, dijo a EL HERALDO uno de los familiares de Montes, que prefirió permanecer en el anonimato.
Al concluir la audiencia de información, al extraditable se le dictó la medida cautelar de prisión preventiva, misma que cumplirá en la cárcel de máxima seguridad de Morocelí, El Paraíso, más conocida como La Tolva.
El Poder Judicial dio un plazo de un mes al gobierno de Estados Unidos para que pueda remitir una copia del documento autenticada y traducida al español en donde se indica los delitos y su calificación por los cuales está siendo requerido.
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La audiencia de preposición de medios de prueba fue programada para el 26 de julio.
El hondureño ha sido solicitado por el delito de conspiración de tráfico ilícito de drogas por la Corte Federal del Distrito Este de Virginia.
Hasta ahora, 13 hondureños han sido extraditados y cuatro se encuentran en proceso de ser entregados a la justicia norteamericana.
Fuentes del Poder Judicial sostienen que hay unas 30 ordenes de captura pendientes de ejecutar, de hondureños pedidos por Estados Unidos, pero la secretaria de Seguridad afirma que están en proceso de búsqueda solo de ocho personas.
