Tegucigalpa, Honduras
Las recomendaciones hechas por la Comisión Interinstitucional de Justicia Penal de reformar el Código de la Niñez y la Adolescencia para agravar las penas ya se encuentra en manos del Poder Ejecutivo y del Congreso Nacional.
Desde estos dos poderes del Estado se impulsarán las reformas planteadas por la Comisión.
Una de las que ha generado mayor controversia es el endurecimiento de las penas contra menores infractores.
De acuerdo al diputado del Congreso Nacional, Tomás Zambrano, “un gran porcentaje de los hechos delictivos de alto impacto, y que más conmocionan al país, tienen participación niños o jóvenes”. En ese sentido, el Congreso estudiará a profundidad el tema del endurecimiento de las penas. En este caso, la Comisión propone una reforma al artículo 205 contenido en el título III del Código de la Niñez y de la Adolescencia, incrementando la sanción máxima de 8 a 15 años.
Cuando la edad del infractor oscile entre los 12 y 13 años, la privación de libertad no podrá ser inferior a dos años ni superior a cinco años.
Asimismo, cuando oscile entre los 14 y 15 años, la privación de libertad no podrá ser inferior a cuatro años ni superior a diez.
Finalmente, cuando esté entre los 16 y 18 años no cumplidos, la privación de libertad no podrá ser inferior a ocho años ni superior a 15.
De acuerdo al juez de sentencia Mario Díaz, la medida de incrementar las penas no es la solución, pero en algunos casos se debe tomar en cuenta.
“Endurecer las penas se debe hacer en algunos casos excepcionales y no debe tomarse como norma general”, dijo. Asimismo, indicó que el gobierno debe atacar a las bandas criminales que reclutan a los menores. Destacó el hecho que la Comisión haya tomado la determinación de no recomendar reducir la edad punible. “Se llegó a la conclusión que ese mecanismo que va a permitir que los jóvenes participen en actividades delictivas”, señaló el togado