Tegucigalpa, Honduras
Las personas que se dedican a la fabricación de medicamentos falsos se encuentran bajo la lupa del Ministerio Público (MP).
En manos del ente fiscal se encuentra una investigación que revela cómo personas adulteran medicamentos para luego ser puestos a la venta de la ciudadanía.
En muchos de los casos este tipo de medicamentos son puestos a la venta en los mercados capitalinos a un bajo costo a la población.
Es por ello que el MP en los últimos operativos ha saturado los mercados, especialmente de Comayagüela, donde se ha logrado identificar este tipo de negocios.
En muchos de los casos, los fabricantes de estos falsos medicamentos clonan la fórmula y el nombre de los medicamentos.
En un caso en poder del MP, un fabricante clonó el nombre de un producto médico de alto renombre a nivel nacional que se vende en pastilla, pero el presunto estafador lo convirtió en pomada para el dolor, con el mismo nombre, lo que se constituye en delito relacionado a la propiedad intelectual, el cual es penado por las leyes hondureñas.
Este tipo de medicamentos no cuentan con el registro ni licencia autorizada por la Secretaría de Salud.
En otro de los casos, los fabricantes manipulan las letras de los medicamentos.
“Estamos investigando dónde los están fabricando para llegar a la raíz, para saber quién las hace o las distribuye”, dijo un fiscal del MP a EL HERALDO.
Aseguró que la intención de la Fiscalía del Consumidor y la Tercera Edad es proteger la salud de la población hondureña.
“La intención de la Fiscalía tiene como política no solamente la afectación del comerciante minoritario sino irnos a la raíz del problema”, señaló.
Asimismo, indicó que en plenas diligencias de investigación se encuentra un caso en el que se decomisaron una serie de barriles y tinas con químicos listos para ser envasados y puestas a la venta.
De acuerdo al Colegio Químico Farmacéutico este tipo de medicamentos ponen en riesgo la salud de la población porque no están debidamente certificados.
En ese sentido, esa institución instó a los hondureños a no caer en las garras de los supuestos estafadores que ponen en peligro su salud, porque no son aptos para ser consumidos por la población