Tegucigalpa, Honduras
“Subí con mi hermana a comprar a la pulpería, cuando íbamos bajando Erick venía para la pulpería. Mi hermana le dijo: mirá, no te vayás a quedar arriba porque es peligroso por los militares. No, le dijo él, solo voy a comprar y ya regreso”, relató Iveth Cruz.
A las 8:45 de la noche, gases lacrimógenos inundaron gran parte de la residencial Francisco Morazán, en la zona de Los Laureles; disparos de fusiles se escucharon, agentes militares habían ingresado a la colonia, a pesar de tener cerrado el portón de acceso.
Dos de esos disparos impactaron en la humanidad del joven Erick Javier Montoya Cruz, de 28 años de edad, un estudiante de derecho en la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH).
Con una herida en el pecho, cerca del corazón, y otra en el costado izquierdo, Erick Javier fue trasladado por un amigo al Hospital Escuela Universitario, pero antes de ser ingresado a este centro asistencial fue declarado muerto.
“Ellos irrumpieron en la residencial violentando el portón en donde estaba la seguridad de la colonia, pero usando el comando lo abrieron y empezaron a tirar gas”, dijo Iveth Cruz.
La presencia de decenas de jóvenes en las calles de este vecindario capitalino se debió a la “protesta de las cacerolas” por el descontento provocado por los últimos acontecimientos políticos en el país. Sin embargo, el estudiante de derecho no era partícipe de ella, según su hermana.
“Todos estos día nos han estado yendo a tirar bombas lacrimógenas sin importar que dentro de las casas hay niños y mujeres embarazadas', lamentó Iveth, además aseguró que pidió ayuda a los militares y no la obtuvo.
Dos tragedias en la familia
Erick Cruz era tío de la joven Allison Gabriela Cruz Flores, de 18 años, quien falleció el pasado 17 de octubre producto de un tiroteo protagonizado por militares y pandilleros en la colonia El Pedregal.
El golpe moral para esta familia capitalina, según lo han expresado, “ha sido durísimo, perderlos a los dos en iguales circunstancias”, dijo doña Iveth.
Dos muertos esa noche
Casi a la misma hora y durante una protesta similar a la de la residencial Francisco Morazán, en la entrada a la colonia Los Pinos fue herido mortalmente Raúl Antonio Triminio Cisnado, de 39 años de edad, residente en la zona.
Un cuñado de la víctima identificado como Marvin Barrientos contó que “nosotros estábamos en la casa y desde allí vimos cómo los que venían en la paila de un carro militar comenzaron a disparar sin ningún motivo y sin antes haber hablado con la gente”.
Los militares se retiraron de la zona y el herido fue traslado lo más rápido que pudieron al Hospital Escuela, pero expiró al cabo de unos minutos en este nosocomio.
Según manifestó el personal forense que realizó el levantamiento, el disparo fue certero e impactó directamente en la frente de Raúl Triminio. Los cuerpos de ambos fueron retirados este lunes de la morgue del Ministerio Público.