Las historias son dolorosas y las autoridades hondureñas las conocieron.
En el extremo sur de Estados Unidos todavía hay hijos separados de sus padres y otros están retenidos en medio de ilusiones vanas de residir en aquel país.
La primera dama Ana García de Hernández, a su regreso a Honduras después de liderar entre el lunes y martes la Fuerza de Tarea del Migrante que recorrió varios centros de detención en Texas, Estados Unidos, confesó que se encontró con dolorosos casos, a los que les ofreció apoyo cuando lleguen al país.
Aseguró que las autoridades norteamericanas fueron contundentes informándole que del total de personas que solicitan asilo, al 85 por ciento se le niega y el restante 15 por ciento tiene oportunidades limitadas.
A la par está la política de “tolerancia cero”, que no tiene vuelta atrás, y el inmigrante que sea detenido será devuelto a Honduras de inmediato.
Autoridades de la Secretaría de Relaciones Exteriores, Derechos Humanos, Migración y otras acompañaron a García de Hernández para ver la situación de los niños, hombres y mujeres que se fueron huyendo de la pobreza e inseguridad en el país.
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Los días 2 y 3 de julioLas autoridades visitaron cuatro albergues de niñas y niños, un centro de procesamiento central de adultos, familias y menores de edad y un centro de detención de adultos. |
Ahí sostuvieron reuniones con el jefe de la Patrulla Fronteriza de McAllen, Manuel Padilla, y con la directora asistente del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas de Estados Unidos (ICE), Marlen Piñeiro.
De igual forma tuvieron encuentros con el jefe para Centroamérica y del Caribe del Departamento de Seguridad Interna, Roberto Soria, con el fin de solicitar la pronta reunificación de las familias que fueron separadas bajo la implementación de la política de “tolerancia cero”.
Trabajo
La Fuerza de Tarea del Migrante anunció la implementación de estrategias encaminadas a tacar las causas de la migración irregular en el país.
García de Hernández confirmó además la creación de unidades de atención y centros de recepción de migrantes retornados para que cuando lleguen al país tengan mejores oportunidades a nivel local y mejoren sus estilos de vida.
A todos los hondureños deportados “les reiteramos nuestro compromiso de esperarles con los brazos abiertos para que juntos logremos mejores oportunidades para salir adelante”, dijo.
Insistió en que se continuará trabajando en mayores esfuerzos de reinserción de migrantes y generación de oportunidades a nivel local de manera eficiente y articulada entre el gobierno central, gobiernos municipales y organismos internacionales que trabajan en esa temática.
En el recorrido por los centros de detención en Estados Unidos la Primera Dama pidió velar porque cada madre y padre que aún no se ha comunicado con sus hijos lo haga.
También constatar la situación de las familias, de los adultos y de los menores no acompañados que han ingresado después de la firma del acuerdo ejecutivo del presidente Donald Trump para no separar las familias en la frontera.