TEGUCIGALPA, HONDURAS.- Aumento en las deportaciones y flujo migratorio, incremento en las capturas de familias y detenciones de niños no acompañados en la frontera sur, separación familiar y aislamiento marcan el inicio del mes en el que se conmemora la prevención de la migración irregular en Honduras.
Pese a los esfuerzos que se han hecho en lo que va de este 2018, las cifras son desfavorables. No son halagüeñas.
Sueño americano
Regresan destrozados, cansados, tristes, hambrientos, pero a pesar de todo el sufrimiento que pasaron su primera opción es volver a intentar y lograr el “sueño americano”.
Honduras enfrenta este año un incremento del 55.9% en las deportaciones de connacionales en comparación con el mismo periodo del año 2017, informó el Observatorio Consular y Migratorio de Honduras (Conmigoh).
Es decir que en siete meses ya han sido deportados 42,636 hondureños, la cifra más alta en los últimos tres años.
Francisco Morazán y Cortés, con 6,861 y 11,278 deportados, son las zonas del país donde más connacionales vuelven con los sueños rotos. Olancho, Comayagua y Colón son otras zonas con impacto por las deportaciones.
Capturas familiares
Llegar a la frontera sur es la recompensa al sacrificio migratorio para los hondureños que salieron del país y la gloria de cruzar o el infierno de ser capturados están juntos.
Un promedio de 60,000 hondureños cruzan al año México y, de esa cifra, unos 36,000 (60%) sufren algún tipo de violencia y al menos 200 mueren por los peligros de la ruta, según cifras de la embajada de Honduras en el país azteca.
El camino es complicado, “la bestia”, el desierto o el río, y la última parada antes del “sueño americano” es la frontera sur, donde en nueve puntos se termina la ilusión de miles de hondureños y comienza la vida de migrantes recluidos.
Cifras de Aduanas y Protección de Fronteras de Estados Unidos del Departamento de Seguridad Nacional (DHS, por sus siglas en inglés) mostraron que en 2018 han sido capturadas 24,451 familias hondureñas, 2,085 más que las registradas el año pasado y 4,225 más que en el 2016.
Estas personas pisan Estados Unidos para entrar directamente a una cárcel y enfrentar un proceso legal que los apartará de sus seres queridos hasta que un juez decida lo contrario.
También Aduanas y Protección de Fronteras de Estados Unidos reveló que hay un grupo aparte de 6,353 familias de connacionales que este año fueron consideradas como inadmisibles en la frontera y enfrentan su deportación directa desde México.
Niños solos
El reto de cumplir el “sueño americano”, a través de la ruta migratoria, es mucho mayor cuando los que viajan son niños.
Cifras de la Aduanas y Protección de Fronteras de Estados Unidos revelaron que capturaron este año a 7,780 hondureños menores de edad que viajaban bajo esta circunstancias o fueron abandonados por los traficantes.
En 2017 fueron 7,784, mientras que en el 2016 la suma alcanzó los 10,468, que es la cifra de capturas mayor en los últimos cuatro años. Estos menores son llevados a centros se reclusión, pero también el informe reveló que un grupo aparte de 1,410 fueron declarados como inadmisibles y comenzaron su proceso de deportación desde México.
Reunificación familiar
Una vez que las familias son capturadas en Estados Unidos comienza el proceso de separación, cifras de la Secretaría de Relaciones Exteriores apuntan a que durante la recién cancelada política de “tolerancia cero” fueron separadas 600 unidades familiares en las que se encuentran 498 menores de edad.
Estas familias aún no han sido reunificadas en su totalidad, pese a que el gobierno de Estados Unidos se comprometió a que las juntaría antes del pasado 26 de julio.
Para Honduras la falencia es aun mayor pues el país no está incluido entre las naciones que reciben información directa en su embajada o consulados en el momento que un connacional es arrestado.
Esta desinformación fue denunciada en la reunión de los países del Triángulo Norte y México (Tricamex) con Estados Unidos, pero la información exacta de las familias separadas no ha sido brindada.
Vida en Estados Unidos
El proceso de migración irregular es duro y pese a los esfuerzos del gobierno de Honduras la cantidad de connacionales en Estados Unidos aumenta considerablemente.
El último informe de la American Community Survey (ACS), detallado en el brevario de la población de origen hondureño en Estados Unidos de Manuel Antonio Flores, máster en población y desarrollo de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH), reveló que hay 973,974 compatriotas viviendo en aquel país: 493,218 son varones y 480,756 mujeres, mientras que 269,764 no pasan de los 14 años.
Como toda población cuando llega a un país extraño adoptaron ciertos lugares como los preferidos para convivir.
El informe reveló que hay 12 zonas que albergan la mayor cantidad de hondureños en Estados Unidos, la lista la encabeza Florida con 169,307 connacionales.
En segundo lugar está Texas con 134,402 hondureños, mientras en Nueva York hay 108,512 connacionales. El resto de las ciudades con mayor presencia de hondureños son: California (92,906), Virginia (63,099), Carolina del Norte (59,381), New Jersey (52,043), Maryland (43,230), Luisiana (43,195) y Georgia (30,173).
Hay un alto nivel de empleo de los hondureños en los Estados Unidos de América: más de dos tercios de ellos tienen un trabajo o están laborando en las fuerzas armadas, siendo significativa la diferencia por sexo, de un 25% superior en los hombres con respecto a las mujeres.
Los niveles de desempleo son bajos, de 4.8%, y son mayores entre las mujeres. Es relevante el porcentaje de personas que no están en la fuerza laboral, que llega a un 27.2%, principalmente más visible en las mujeres, y la brecha entre sexos es un cuarto del total.
En lo que respecta a las ocupaciones resaltan la construcción, actividades de limpieza, chef y cocineros, pintores, construcción y mantenimiento, conserjes y limpiadores de edificios, carpinteros, trabajadores de mantenimiento, cajeros, camareros y camareras, obreros y mano de obra de carga, existencias y materiales.
El informe explicó que los ingresos personales anuales ascienden a un promedio de 21,501.92 dólares, (516,024 lempiras), las mujeres obtienen solo un 58% del promedio de ingreso de los hombres, existiendo una amplia brecha salarial por sexo.
Cabe resaltar que el 63% de los hondureños en Estados Unidos puede decirse que tienen un nivel aceptable del idioma inglés. No obstante, la educación es muy limitada pues un 47% de ellos, de 25 años y más, no ha podido culminar la secundaria.
El riesgo de las personas es compensado con una vida más favorable y es la cantidad de oportunidades y la concientización del peligro lo que puede frenar la migración irregular.