La número de emergencia 911 recibe una llamada durante la noche. Al otro lado de la línea, una mujer pide auxilio. Su marido la ha golpeado y teme por su vida.
La escena se repite a diario en Honduras; sin embargo, entre el 15 y 30 de cada mes es más frecuente.
Según la Policía Nacional, los días en los que los empleados reciben su salario, se elevan los casos de violencia doméstica.
'En la mayoría de los casos hay abuso de bebidas alcohólicas que alteran el comportamiento de las personas', dijo una fuente policial.
Cifras oficiales indican que los fines de semana, principalmente entre la noche del sábado y madrugada del domingo, aumentan las denuncias de comportamiento violento de hombres contra mujeres.
Los casos de maltrato físico y psicológico se registran con más frecuencia entre mujeres dependientes económicamente de su pareja, destacan las autoridades.
Solo durante el mes de enero, más de 400 denuncias de violencia doméstica se vemtilaron en los tribunales de justicia de la capital de Honduras.
En los juzgados capitalinos se atienden a diario entre 10 y 20 denuncias.
Las víctimas, sean mujeres y hombres, reciben consejería para superar su problema.
De acuerdo al Ministerio Püblico de Honduras, de las 11,000 denuncias por violencia doméstica recibidas en 2013, el 50 por ciento fueron declaradas en abandono por las víctimas.
Los fiscales argumentan que el abandono de casos podría deberse a amenazas que recibirían las víctimas, por parte de los agresores, pese a que en casi seis mil de las resoluciones judiciales incluyeron una restricción para que el agresor permanezca alejado de la víctima.