Una pena máxima de cadena perpetua podría enfrentar en Estados Unidos Fabio Lobo Lobo (43), hijo del expresidente Porfirio Lobo (2010-2014).
Así lo advirtió ayer la fiscalía federal para el Distrito Sur de Nueva York luego de que fuera capturado en Haití en un operativo de la Administración de Drogas y Narcóticos (DEA) y llevado a territorio norteamericano. Fabio Lobo fue procesado por narcotráfico e inculpado de conspirar desde 2009 para importar y distribuir cinco o más kilos de cocaína a Estados Unidos.
Fue presentado ayer en horas de la tarde ante el juez federal para el Distrito Sur de Nueva York, Kevin Nathaniel Fox, tras su arresto en tierras haitianas.
Durante la audiencia, el acusado se declaró no culpable de cargos de conspiración para importar cocaína a Estados Unidos.
Su defensa, el abogado Manuel Retureta, se negó a hablar sobre el caso y la situación que enfrenta el detenido.
El fiscal federal Preet Bharara dijo que “Fabio Lobo intentó romper la ley estadounidense por conspirar para traficar cocaína siendo el hijo de un exfuncionario público, sin embargo, no significa que está por encima de la ley”.
EL HERALDO tuvo acceso al comunicado emitido por el Departamento de Justicia del Distrito Sur de Nueva York sobre la audiencia a la que fue sometido el imputado hondureño. Lobo Lobo es el hijo mayor del expresidente Porfirio Lobo y su captura fue confirmada el jueves en horas de la tarde mediante un comunicado emitido por Casa Presidencial.
La información fue dada a conocer luego de que el embajador de Estados Unidos, James Nealon, informara al presidente Juan Orlando Hernández sobre la captura en una reunión sostenida ese mismo día en horas de la mañana.
“El gobierno de Honduras a la comunidad nacional e internacional, informa: que ayer miércoles 20 de mayo, en horas de la noche, fue capturado en la República de Haití el señor Fabio Lobo Lobo, en una operación antidrogas de las autoridades de ese país con apoyo de la DEA”, informó el Ejecutivo.
De inmediato el expresidente Lobo reaccionó en las gradas de Casa Presidencial, en donde visiblemente afectado dijo que si su hijo es responsable tiene que enfrentar la ley.
“Espero que sea inocente... Eso no me niega para mi entender que si es culpable, él debe responder”, dijo el exgobernante hondureño.
Detención
En el comunicado del Departamento de Justicia del Distrito Sur de Nueva York el agente especial de la DEA, Mark Hamlet, dijo: “La detención de Fabio Porfirio Lobo demuestra, una vez más, que nadie está por encima de la ley...”.
“El señor Lobo será procesado en un tribunal estadounidense, gracias, en gran parte, a la gran cooperación de nuestros socios internacionales, en particular el gobierno de la República de Haití”.
Señala que de acuerdo con las alegaciones de la parte acusadora, Lobo conspiró entre 2009 y 2014 de violar las leyes de narcóticos que prohíbe la importación de cocaína a Estados Unidos.
“En concreto, la acusación a Lobo de conspirar para importar cinco o más kilogramos de cocaína a Estados Unidos de un país extranjero y distribuir cinco kilogramos o más de cocaína a sabiendas y con la intención de que sería importada a Estados Unidos”.
“El cargo en la acusación conlleva una pena máxima de cadena perpetua. La pena máxima potencial en este caso se prescribe por el Congreso y se ofrece aquí solo para fines informativos, como cualquier condena de la parte demandada será determinada por un juez”, señala el boletín informativo norteamericano.
Información en poder de EL HERALDO establece que agencias antidrogas de Estados Unidos le seguían la pista a Lobo Lobo desde hace varios años, incluso desde antes de que su padre fuera Presidente.
Esa labor de inteligencia permitió conocer que el imputado tuvo nexos con la banda de narcotraficantes de Los Cachiros, la principal organización de tráfico de drogas que existía en Honduras hasta su desarticulación.
Los Cachiros, una banda formada por la familia Rivera Maradiaga, fueron declarados como narcotraficantes por el Departamento de Estado de Estados Unidos y posteriormente solicitó la extradición de siete miembros de ese grupo.
Dos de ellos, Javier Heriberto y Debis Leonel Rivera Maradiaga, se entregaron a las autoridades de Estados Unidos.
