Un juez federal de Miami ordenó el traslado a Nueva York del empresario Yankel Rosenthal Coello, acusado por lavado de activos y soborno, donde esperará la fecha de su juicio.
Rosenthal compareció este martes con vestimenta de presidiario en una audiencia que duró dos minutos ante el togado Edwin Torres en el Edificio Federal de Justicia James King, en Miami, para conocer si le concedía el derecho a presentar una fianza para ser juzgado en libertad.
No obstante, el juez Edwin Torres pospuso hasta su llegada a esa ciudad la audiencia para decidir una eventual libertad bajo fianza mientras espera juicio, así que permanecerá detenido hasta ese momento.
Por los momentos, no trascienden datos sobre su traslado a Nueva York, dijo una fuente a EL HERALDO.
Familiares del empresario Rosenthal se presentaron al edificio federal en Miami y a su salida no emitieron comentarios y lo mismo hizo el abogado del empresario, Norman Moscowitz.
Los medios de comunicación no han tenido acceso a las audiencias en las que ha comparecido Yankel Rosenthal, pero cuando este sea presentado en la Corte del Distrito Sur de Nueva York se prevé que sí haya presencia de la prensa.
Moscowitz: Es inocente
El abogado Moscowitz dijo en un carta enviada a EL HERALDO que fue él quien pidió que su representado fuera transferido a Nueva York para que sea juzgado “a la mayor brevedad posible”.
“El día de hoy, Yankel Rosenthal se presentó en la Corte Federal del Distrito de Miami, donde solicitó ser transferido a la mayor brevedad posible a Nueva York para confrontar los cargos que allí le imputan”, dice.
En la nota insiste en que “los cargos del Sr. Rosenthal no tienen ni fundamento ni mérito y confía en que la evidencia que se presentará en la corte demostrará que él es inocente”.
Rosenthal es un empresario agrícola y presidente del equipo Marathón de la primera división del fútbol de Honduras.
Delito
Yankel Rosenthal fue arrestado el 6 de octubre en el Aeropuerto Internacional de Miami por agentes de la Administración Federal de Antidrogas (DEA, por sus siglas en inglés) y el 7 de octubre compareció ante la Corte de Clyde Atkins, en esa ciudad, en la audiencia de vista de caso.
La audiencia se trasladó para el viernes 9 de octubre, pero esta se suspendió porque el abogado de Yankel Rosenthal presentó una solicitud de fianza.
La Fiscalía del Distrito Sur de Nueva York acusó a Yankel Rosenthal por lavado de activos provenientes del tráfico de drogas y pago de sobornos a un funcionario, delitos que también imputó a su tío Jaime Rosenthal; el hijo de este, Yani Rosenthal, y el abogado Andrés Acosta García.
Los delitos que les imputan a los Rosenthal se sancionan con 20 años de prisión y multas millonarias.
Según la acusación, los Rosenthal utilizaron al Banco Continental para el blanqueo de dinero producto del tráfico de drogas entre 2004 y 2015.
Estas acción criminal es una violación al título 18 del Código de Estados Unidos, secciones 1956 y 1957.
La demanda también señala que los acusados cometieron “delito contra una nación extranjera que implica el soborno de un funcionario público”, estipulado en el título 21 del Código de Estados Unidos.
El 7 de octubre la Oficina de Control de Activos Extranjeros del Departamento de Estado de los Estados Unidos designó a Jaime, Yani y Yankel, todos de apellido Rosenthal, como traficantes de narcóticos e incluyó en este señalamiento a siete grupos empresariales de la familia.
La designación establece que los Rosenthal “proveen servicios de lavado de dinero y otros para apoyar actividades de tráfico internacional de narcóticos de múltiples traficantes de drogas centroamericanos y de sus organizaciones criminales”.
Como consecuencia de esta designación se ordenó el congelamiento de cualquier bien que los Rosenthal tengan en Estados Unidos y se prohíbe a los ciudadanos y empresas estadounidenses hacer negocios con estas tres personas y sus empresas designadas.
Jaime y Yani Rosenthal aseguraron que responderán ante la justicia de Estados Unidos por los delitos que les imputan, pero no precisaron cuándo se presentarán.
Hasta el lunes la Cancillería no había recibido ninguna solicitud de extradición del gobierno de Estados Unidos contra los cuatro acusados, según una fuente de esa entidad.
