Pese a ser negocios lucrativos aún en tiempos de dificultades económicas, la mayoría de moteles incurren en la evasión de impuestos, según la Dirección Ejecutiva de Ingresos (DEI).
Por otra parte, montar un negocio de este clase desde la clandestinidad traerá más consecuencias, advierten las autoridades, pues la operatividad legal de un motel depende de una serie de requisitos.
En primer lugar, es necesario que se constituya la sociedad mercantil, donde el empresario debe de acudir al Registro Mercantil para pagar los derechos de inscripción con los documentos originales.
Posteriormente se deberá registrar ante la Cámara de Comercio e Industrias de Tegucigalpa (CCIT), cumpliendo con el pago de los derechos de registro conforme al monto del capital, donde el costo varía y si se encuentra en la categoría más baja que oscila desde 1 hasta 200 mil lempiras solo debe de pagar L. 590.
Todos los moteles deben de contar con su propio Registro Tributario Nacional (RTN), el cual debe de gestionarse ante la Dirección Ejecutiva de Ingresos (DEI) y cumplir con el régimen de facturación vigente.
Además, este tipo de negocios tienen que tramitar el permiso de operación conforme a la municipalidad donde funcionará, incluyendo el cumplimiento de licencias según el rubro en el que opera la empresa entre ellas la sanitaria.
En el caso de los moteles se encuentra dentro de la categoría de establecimientos varios y solo hay dos clasiificaciones.
Un total de 500 lempiras deberán de pagar por licencia sanitaria los moteles que están en el primer rango y el doble -es decir L. 1,000- cuando se trata de negocios de segunda categoría, similar a los valores que tienen que pagar también los hoteles.
Operativos
No es la primera vez que la DEI realiza operativos en moteles, ya que en marzo de 2015, las autoridades de esta institución anunciaron que la mayoría de estos establecimientos no cumplen con el pago de sus tributos.
La titular de la entidad recaudadora de tributos del Estado, Miriam Guzmán reconoció que la actividad de estas empresas es bastante rentable, pero no pagan sus impuestos, incluso no facturan.
'Esta actividad es bastante rentable, lastimosamente no han pagado los impuestos correspondientes (...) pudimos comprobar que muchos de estos espacios no están pagando impuestos, no facturan, en algunos encontramos que entregan facturas como si fueran ‘car wash’ y nada que ver con el giro comercial de la empresa”, explicó en ese entonces.
Este año no ha sido la excepción y de cara al día del Amor y la Amistad, personal de la DEI efectuó acciones en la que determinaron clausurar cuatro moteles en San Pedro Sula debido a la falta de emisión de facturas o en otros casos por tener documentos fiscales vencidos.