Un corazón pintado en rojo con un mensaje que dice 'Mamá te amo' y en letras mayúsculas la palabra 'AMISTAD'. Ese fue uno de los últimos dibujos que el pequeño Exequiel Hernández lograría hacer en su vida.
Y es que a este tierno niño -de tan solo seis años edad- su padrastro le cortó las ilusiones y los sueños de ir a la escuela, educarse y ser un hondureño de bien.
Exequiel vivió sus últimos instantes junto a la compañía de sus amiguitos en su escuela, de donde fue raptado cuando su padrastro, cegado por la ira, aprovechó el momento que regresó para llevárselo.
Según el relato de la madre del menor, era la primera semana que su hijo asistía a la escuela y estaba muy completamente feliz.
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Sin embargo, su cuerpo fue encontrado el pasado lunes en estado de descomposición, ya que tenía entre tres y cuatro días de fallecido, según el dictamen preliminar de las autoridades.
Mientras tanto, la Policía capturó ayer al supuesto responsable del crimen, identificado como José Perdomo, quien confesó haber matado a su hijastro por problemas con la madre, de quien se había separado tiempo antes.
En la última semana la madre denunció que Perdomo, ahora su excompañero de hogar, se había llevado al menor y a una niña que es hija de ambos, pero antes le infirió una herida en el cuello al pequeño exequiel.
La destrozada mujer cuenta que la niña le comentó que su papá le dio a beber algo a su hermanito y que esa bebida le produjo muchos vómitos, sin embargo, no supo nada de él porque fueron separados.
Después del hallazgo del cadáver del menor, la Policía realizó un operativo que terminó con la captura de José Perdomo en el barrio Rivas de Comayagua.
El homicida confesó haber matado a su hijastro porque tenía problemas con la madre.
Parte policial
José Luis Flores Ordóñez, jefe departamental de la Policía en Comayagua, explicó que el supuesto culpable llegó a la estación policial a declarar para aportar en las investigaciones, pero en medio del interrogatorio terminó aceptando su delito.
“José Francisco Perdomo fue detenido en las instalaciones de la Policía y es padrastro de Exequiel Hernández, que fue encontrado muerto, y al tomarle la declaración ha confesado que participó en la muerte del niño y relató cómo le quitó la vida”, dijo Ordóñez.
El cadáver del menor fue trasladado a la morgue de Tegucigalpa y permanece en ese lugar a la espera de los resultados de ADN que se le practicaron
