Tegucigalpa, Honduras
La cúpula de la Policía Nacional dimitirá en un corto plazo como parte del proceso de reestructuración del organismo armado, mientras los miembros de la quinta a la novena generación que aceptaron retirarse de sus cargos comenzaron desde ayer a entregar sus implementos oficiales.
Estas son parte de las medidas de depuración que se han puesto en práctica amparadas en dos decretos, uno legislativo y otro ejecutivo, creados para acelerar el adecentamiento de la institución.
La estrategia de reorganización policial fue ordenada por el gobierno luego de que EL HERALDO divulgara el informe DGPN-DED-2-DI-1101-2009 de la Dirección de Inteligencia Policial, que revela que miembros de la cúpula de la Policía Nacional se aliaron para asesinar al exjefe de la Dirección de Lucha contra el Narcotráfico, Julián Arístides González.
40 van fuera
Una fuente de entero crédito reveló a EL HERALDO que unos 40 oficiales, entre subcomisionados, comisionados, comisionados generales y directores generales que pertenecen de la quinta a la novena generación, llegaron a un arreglo con la Secretaría de Seguridad para renunciar y recibir prestaciones laborales.
La cúpula policial está integrada en su mayoría por efectivos de la sexta a la novena promoción, lo que implica que también dejarían sus puestos.
“La cúpula va a participar en la reestructuración y luego dejarán sus cargos, pero se irán porque acompañarán la reestructuración y no porque tengan cuentas pendientes o estén involucrados en irregularidades”, explicó la fuente.
El director general de la Policía Nacional es Félix Villanueva, nombrado en noviembre de 2014, mientras que el subdirector es el comisionado general Quintín Juárez García.
El comisionado Héctor Iván Mejía es el director de operaciones, Organización y Adiestramiento; el comisionado Elvis Javier Cantarero Ventura dirige Inspectoría General y el comisionado de Policía Raúl René Aguilar Mazzoni funge como director nacional de la Policía Preventiva.
Por su lado, el comisionado de Policía José Amílcar Mejía Rosales es el director de la Dirección Nacional de Educación Policial; el comisionado Osman Fabiel Díaz Santos coordina la Dirección Nacional de Tránsito y el comisionado Mario Roberto Sevilla López tiene a su cargo la Dirección Nacional de Unidades Especiales.
“Altos oficiales de esas cinco generaciones, que asistieron el martes pasado a una reunión en la Secretaría de Seguridad para finiquitar sus renuncia, aceptaron dimitir con la condición de que todos los miembros de esas generaciones salieran, sin excepción”, dijo la fuente.
“Existía resistencia de algunos miembros de la novena generación y había un comisionado que está en la cúpula que insistía en quedarse, pero se le obligó a aceptar que se vaya”, explicó la fuente.
Extraoficialmente trascendió que los exdirectores de la Policía Nacional Ramón Sabillón (quinta promoción) y Juan Carlos Bonilla (sexta promoción) no aceptaron renunciar.
Quienes se retiren de forma voluntaria gozarán del pago de prestaciones, según lo estipulado en el decreto legislativo 21-2016, que declara de emergencia la depuración de la Policía, y el decreto ejecutivo aprobado en Consejo de Ministros que ordena una reestructuración de la Secretaría de Seguridad.
El decreto 21-2016 dice que el Poder Ejecutivo, en el caso de retiro voluntario de un policía, procederá al reconocimiento y pago de derechos laborales y prestaciones sociales, para lo cual podrá establecer convenios de pago.
Esta norma también crea la Comisión Especial de Depuración de la Policía Nacional, que quedó conformada por el pastor Alberto Solórzano, de la Confraternidad Evangélica de Honduras; el coordinador de la Asociación por la Paz y la Justicia, Omar Rivera; y la miembro de la Comisión interventora del Instituto Hondureño de Seguridad Social, Vilma Morales.
Los comisionados acompañarán al ministro de Seguridad en el proceso certificación mediante pruebas de confianza que se practicarán a los uniformados. Quienes resulten reprobados serán despedidos sin derecho a prestaciones.
Mientras, el decreto ejecutivo PCM-029-2016 para la reorganización de la Secretaría de Seguridad establece que en el caso de los sujetos de este proceso que soliciten su retiro voluntario también se procederá al reconocimiento y pago de los derechos y prestaciones sociales que por ley les correspondan, sobre los cuales se podrán establecer convenios de pago. En la Policía Nacional existen unos 14 mil miembros.
No hay espacio
El vocero de la Secretaría de Seguridad, Leonel Sauceda, informó que a los oficiales que han firmado su retiro voluntario se les dio hasta el 1 de mayo para que puedan hacer los trámites de sus renuncias.
“Es así que se ha iniciado la primera fase de señores oficiales de las promociones más antiguas de la institución, de la quinta a la novena, ellos han solicitado el retiro voluntario en razón de que la reestructuración de la Policía Nacional no les permitiría responsabilidades, no hay cargos dentro de esa nueva estructura”, indicó.
Después de esta primera fase comenzará la segunda etapa que consiste en la depuración policial, en la que se destituirán elementos con base en informes e investigaciones que evidencien que han cometido irregularidades, dijo.
“Serían cancelados por falta de idoneidad moral y profesional, por la pérdida de la confianza, porque no tienen la actitud ni el compromiso para continuar en la institución y, en ese sentido, queremos mencionar que están avanzando los procesos”, acotó.
El ministro de Seguridad, Julián Pachecho, dijo la semana pasada que ya existía un listado de unos 1,400 policías que serán depurados.
Entregan equipos
Mientras, varios oficiales que aceptaron el retiro voluntario comenzaron desde ayer en horas de la mañana a entregar sus equipos en el Comando de Apoyo Logístico de la Policía (Calpo), ubicado en la aldeas Las Casitas, a la altura de la Universidad Católica de Honduras, en Tegucigalpa.
EL HERALDO captó el momento en que elementos iban con los estuches donde guardan sus armas y hasta los chalecos antibalas que tenían asignados para devolverlos en el Calpo.
“Irán entregado todo, la chapa, las esposas, las armas de reglamento y todo lo que tenían asignado que le pertenece al Estado”, dijo la fuente.
Los elementos en retiro que ganen más de 30 mil lempiras mensuales o tengan bienes a su cargo también deberán hacer el trámite de declaración en el Tribunal Superior de Cuentas.
El embajador de Estados Unidos, James Nealon, publicó en su cuenta de Twitter que “es muy importante que todos estén comprometidos con la depuración de la Policía”
Elementos de la cúpula policial que participarán en la reestructuración y luego renunciarán: