Tras las separación de altos mandos de la Policía Nacional, las reacciones por esta determinación de la Comisión Especial para la depuración y transformación de la institución armada no se hicieron esperar por parte de los afectados, quienes rechazaron su destitución que calificaron de injusta e improcedente.
El comisionado general Leopoldo Flores Milla expresó que 'por honor prefiero renunciar y decirle a mi país aunque de repente no lo crean que cumplí con mi misión de hacer mi trabajo hasta donde me lo permitieron; donde a mí no me han llamado no llego y donde no me necesitan tampoco me quedo'.
'La honestidad no se disimula, hay que tener mucho cuidado, hay gente que llora en los medios y pide perdón de cosas que están pasando, pero yo creo que agradecen a Dios por lo que hicieron, sin embargo no lo dicen', agregó, refiriéndose a algunos uniformados activos.
El exdirector de Recursos Humanos de la Policía Nacional destacó que posee tres décadas de formar parte del cuerpo del orden y puede mencionar los altibajos de los gobiernos que pasaron por ese tiempo, aquellos que apoyaron a los policías y quienes los ofrecieron como lo peor.
Además, aclaró que ni su nombre o foto salen en los reportes de policías implicados en crímenes de alto impacto y que fueron divulgados tanto por EL HERALDO como por The New York Times y pese a haber sido denunciado por enriquecimiento ilícito en el Tribunal Superior de Cuentas (TSC), acudió a notificarse de la resolución en la que se encuentra exento y solvente con el Estado.
A través de un comunicado, la delegación nombrada para el proceso de depuración policial instó a la Secretaría de Seguridad para que se ratificara, separara y suspendiera de sus cargos a generales que se encontraban bajo evaluación y cuya información y hoja de servicio fueron solicitadas previamente a diversas instituciones.
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No encajan
'Ellos -oficiales cancelados- como generales estaban activos dentro de la estructura de la Policía, incluso estaban encaminados a asumir otro tipo de responsabilidad; en la reconceptualización que estamos haciendo y en ese nuevo concepto de trabajo estas personas ya no encajan en esa estructura, por eso salen no por el tema de depuración', explicó el integrante de esta comitiva, Alberto Solórzano.
Enfatizó que los tres generales fueron separados de las filas de la institución armada como parte de la reestructuración de la Policía Nacional y no por otros señalamientos.
El también titular de la Confraternidad Evangélica de Honduras (CEH) dijo que 'con ellos se conversó de manera individual, por respeto a cada uno y coincidieron que en el nuevo concepto del trabajo de policía ya no encajan y deben de dar paso a los siguientes momentos y salen con todos sus derechos'.
Las decisiones de la Comisión Especial se han basado en información recibida, procurando que las determinaciones no se fundamenten en rumores o especulaciones, por lo cual han recibido el sustento para convertirlo en un insumo que fortalezcan el criterio, aseguró.
No he renunciado
De su lado, el comisionado general Leandro Osorio Santos afirmó que 'no he negociado con nadie, es una decisión que ha tomado la comisión, sin embargo yo no he firmado nada, me han renunciado, pero quiero decirle a la sociedad hondureña que me desempeñe por 32 años al servicio de la Patria, con honestidad para beneficio de todos; tengo mi frente en alto'.
El coronel Luna Gutiérrez convocó a los oficiales separados a una reunión, donde fueron notificados de esta situación y se les pidió firmar, aunque en su caso particular no lo hizo y desconoce cómo procedieron los demás compañeros al respecto, reveló.
'Han pedido mi cabeza y como dijo el señor director lo cambiamos por hacer bien el trabajo, hay estructuras, gente que no le interesa que el general Osorio este adentro; que hagan lo que tengan que hacer, yo no voy a firmar, sin embargo ellos ya tenían todo listo, solo cuestión de trámite y eso ya estaba cocinado', sostuvo el exdirector de la desaparecida Dirección Nacional de Investigación Criminal -DNIC-, ahora Dirección Policial de Investigaciones (DPI).
Osorio Santos anunció que se reunirá con sus abogados para tomar una resolución y que la realidad que enfrenta no es por dinero, sino por dignidad.
La crisis política del 2009 fue el momento más difícil de su carrera policial profesional, ya que mientras unos hicieron la 'fiesta', los policías se encargaron de 'limpiar la cocina', evitando un derramamiento de sangre en el territorio hondureño, confesó.
'He tenido la suerte de que hay empresas que quieren contratarme con un mejor sueldo que en la Policía; el único daño que he hecho es trabajar por Honduras. Hay una persona que dijo a inicios enero que venían cosas grandes y se atrevió a decir hasta nombres de las próximas autoridades que va a tener el país y entonces eso ya estaba maquinado', concluyó el exintegrante de la cúpula policial.
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