Las quemaduras en el 45% de su cuerpo cegaron la vida del pequeño Walter Adalid García este lunes en horas de la mañana.
El menor había resultado con severas lesiones en su cuerpecito luego que un sujeto identificado como Dagoberto Raudales Romero, le prendiera fuego a la vivienda donde se encontraba Vilma Esperanza García y sus dos pequeños hijos de seis y cuatro años.
Tras el incendio la madre y la niña Escarleth Ivana Licona García perdieron la vida tras ser ingresadas al Hospital Escuela Universitario (HEU), el pasado 16 de mayo.
El fatídico suceso se registró el pasado 11 de mayo en la comunidad de San Antonio Dolores, Copán, al occidente de Honduras, cuando Dagoberto le puso candado a la casa donde se encontraban las tres víctimas y acto seguido le prendió fuego.
El pequeño Walter Adalid Garcia, de seis años, estuvo interno en ciudados intensivos de HEU durante al menos diez días donde expiró a las 6:15 de esta mañana debido a que sufrió una falla múltiple de órganos puesto que sus riñones ya no funcionaban y respiraba gracias al auxilio de un ventilador mecánico.
'Walter Adalid el pasado viernes había sido sometido a una doble amputación de sus piernas para eliminar el tejido muerto a donde ya no había circulación sanguínea, el proceso quirúrgico se hizo para aumentar la posibilidad de vida, sin embargo su vida se apagó', expresó Miguel Osorio, relacionador público.
Este día el menor sería sometido a dos nuevas amputaciones de su antebrazo izquierdo y su mano derecha, además que iba a requerir una reconstrucción facial, sin embargo su delicado estado de salud no le permitió sobrevivir más tiempo.
Sus familiares trasladarán el cadáver del menor hasta la comunidad de donde son originarios, para ser sepultado junto a su madre y hermana.
Mientras que el pasado jueves, tras una orden de captura y la publicación de una fotografía, autoridades capturaron a Dagoberto Raudales, principal sospechoso de prenderle fuego a la vivienda donde se encontraba la mujer y sus dos niños.