Un obrero hondureño murió soterrado y de forma dramática producto de un derrumbe en una zona de construcción en el bulevar Kuwait de capital de Honduras.
La víctima, que quedó bajo un alud de tierra donde se construye un nuevo paso a desnivel, fue identificado como Julio César Gálvez Sierra, de unos 29 años de edad.
A las 3:00 de la tarde llegó Medicina Forense, lo que provocó una ola de angustia y especulaciones sobre si el sujeto había perdido la vida, lo que finalmente se confirmó unos minutos después.
EL HERALDO conoció que el obrero habría perdido la vida desde la 1:00 de la tarde. A las 3:40 de la tarde, los socorristas lograron rescatar el cuerpo de la víctima.
Durante más de una hora se luchó para librar de la tierra al obrero hasta la parte superior de su cuerpo, sin embargo sus piernas permanecían bajo el pesado alud en la mayor parte del tiempo.
'Ayudenme no me dejen aquí, me duelen las piernas', decía el pobre hombre cuando aún estaba atrapado.Hasta el sitio del derrumbe llegó la tia del obrero, alrededor de la 1:00 de la tarde, para ver el estado de su pariente, sin embargo tuvo que ser atendida en una ambulancia para que se controlara antes de ver al joven.
Al parecer un muro de la construcción que estaban realizando se vino abajo y dejó al joven hondureño atrapado.
Como primera medida los socorristas le aplicaron oxígeno y lo canalizaron para poder aplicarle suero y tratar de mantenerlo consciente y de esa forma mantenerlo con vida, lo que no fue posible.
Inicialmente los demás obreros comenzaron a retirar la tierra con lo que tenían a la mano, pero se podría estar empleando una retroexcavadora para poder librarlo.
El lamentable incidente se habría producido debido a que la tierra se encuentra saturada por las últimas lluvias que han caído en la capital.
En las labores trabajaron miembros del Cuerpo de Bomberos, ingeniero de una empresa constructora y compañeros del obrero.
Por el estado de saturación de agua en el terreno, en Tegucigalpa se han registrado varios incidentes como el derrume del muro de una escuela y de una vivienda en Villa Adela, en Comayagüela.
Desgarradoras palabras de la esposa
Mientras sus lágrimas rodaban por su rostro y la angustia invadía su alma, la esposa del obrero recordó las últimas palabras de su compañero, quien se despidió de su pequeña hija en horas de la mañana, sin imaginar que nunca regresaría.
“Adiós mi amor, te amo mucho”, le dijo a su bebé Julio César Gálvez Sierra, quien luego de cuatro largas horas soterrado no aguantó más y murió mientras los grupos de rescate y sus compañeros trataban de salvarle la vida.
“Me siento mal, muy mal, por mis niños y por él. Siempre yo lo aconsejaba porque nosotros estamos yendo a la iglesia”, recordó Zenia Borjas.
“Él es muy puntual y responsable, se golpeó trabajando y yo le dije que no viniera a trabajar hoy, pero Julio me dijo que si faltaba un día lo iban a despedir”, explicó Borjas mientras su dolor se acrecentaba al saber que su esposo ya no estaría más a su lado.
El pasado 17 de mayo tres hondureños perdieron la vida al quedar soterrados en una mina ubicada en Choluteca.