Tegucigalpa, Honduras
Aunque usted no lo crea, ninguna de las dos personas que mantuvieron una fuerte discusión por el cantar de un gallo en Trujillo, Colón, es el verdadero dueño del ave.
El gallo, que de manera insólita permaneció preso por 48 horas, es propiedad de Franklin Gustavo Arriola, quien rompió el silencio y contó a EL HERALDO la verdad de los hechos.
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“Yo le presté el gallo a mi primo para que le sacara raza (cruzarlo) y resulta que el vecino tuvo un problema con él”, dijo Franklin.
Durante un período de tres semanas el extrovertido y plumífero animalito estuvo en manos Óscar Mejía, primo de Franklin, donde hizo de las suyas con las gallinas y hasta por su mal comportamiento incomodó a un vecino de la comunidad.
El gallo andaba suelto a cualquier hora, se cruzaba la cerca que divide una casa de la otra, cantaba, correteaba de un lado a otro las gallinas, pero la problemática se desató por el tradicional cantar en horas de la madrugada que incomodó el sueño de John, un estadounidense que hace poco tiempo llegó a vivir Trujillo y no estaba acostumbrado al cantar de los gallos.
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La mascota dormía en un frondoso árbol de mango al pie de la ventana de la habitación de John, cantó durante 21 días consecutivos desde las dos de la mañana, hecho que le colmó la paciencia y fue el origen de la discusión.
Pleito
Ambos señores estuvieron a punto de irse a los golpes y hasta en una ocasión Mejía le lanzó una pedrada a John advirtiéndole que dejara en paz al ave, a tal grado que hasta la misma Policía tuvo que decomisar el ave por tres días para evitar mayores problemas.
Fue hasta que el primo de Franklin y su vecino llegaron a una conciliación promovida por el Juzgado de Paz que el famoso gallo le fue entregado nuevamente a su verdadero criador.
“Cuando yo miré la foto en Facebook dije: ‘ese es mi gallo’, porque lo conozco desde pequeño, yo fui donde él (primo) y le dije que me rescatara mi gallo, porque me valía bastante”, relató.
Dijo que nunca se esperó que su mascota causara los problemas que se reportaron desde el lunes anterior. El gallo no tiene un nombre en concreto, según confirmó su dueño.
“Yo tenía previsto echarlo a pelear en Semana Santa, pero por el problema que pasó ya no lo haré porque ahora necesita cuido”, manifestó.
Precio
Ante este curioso hecho hay varias personas que le han ofrecido comprar el ave a Arriola.
EL HERALDO conoció que quien ofrezca la suma de 100 mil lempiras obtendrá el gallo de forma inmediata.
“Si me los ofrecen, yo con gusto (lo vende), porque va a haber otro que me lo va a querer venir a robar”, aseguró.
Superado
El problema causado por el gallo aparentemente ya fue superado por los vecinos, según confirmó un poblador de la comunidad de Trujillo.
EL HERALDO intentó conocer la versión de los dos vecinos implicados en la discusión, pero manifestaron que no quieren hacer más grande el problema porque ya todo está en paz y tranquilidad.
“Ellos dicen no ser enemigos, esto se ha exagerado por la misma Policía”, manifestó uno de los vecinos del lugar.
El gallo está de nuevo en su casa de habitación, pero esta vez su dueño adoptó la medida de amarrarlo para evitar otro problema con los vecinos.
+Una hora después de quedar libre, el gallo se mete a otro problema en su gallinero
