Helsinki, Finlandia
Un hombre finlandés que nació mujer se convirtió en la primera persona transgénero que dio a luz en el país, informaron este miércoles los medios locales, lo que provocó controversia ya que en el país es obligatorio por ley ser estéril para cambiar de sexo.
'El bebé pesó casi 4 kg y midió 53 centímetros' al nacer, hace 15 días, declaró a Lannen Media el hombre, cuya identidad no fue revelada.
El hombre, un treintañero, cambió de sexo legalmente en 2015, tras años de tratamiento con testosterona. Pero decidió anular la cirugía de cambio de sexo con la que completaría su transición física para intentar tener un hijo con su marido.
La ley finlandesa estipula que una persona debe demostrar que es estéril para cambiar legalmente de sexo.
En la práctica, los centros médicos consideran que sus pacientes transgénero se vuelven estériles de facto cuando llevan a cabo un largo tratamiento con testosterona.
Pero si se suspende la terapia hormonal, la persona puede volver a ser fértil, como se vio con este excepcional nacimiento.
'¿Quiero que la sociedad me diga lo que puedo hacer con mi cuerpo y con mi vida? Nada me detendrá. Soy un hombre libre', afirmó durante su embarazo en una entrevista con el mayor diario finlandés, Helsingin Sanomat.
Finlandia es el único país nórdico que exige ser estéril a quienes quieren cambiar legalmente de sexo, lo que generó encendidas críticas por parte de organizaciones de defensa de los derechos humanos en los últimos años.
Al hombre se le concedió la baja por paternidad.
Un hombre finlandés que nació mujer se convirtió en la primera persona transgénero que dio a luz en el país, informaron este miércoles los medios locales, lo que provocó controversia ya que en el país es obligatorio por ley ser estéril para cambiar de sexo.
'El bebé pesó casi 4 kg y midió 53 centímetros' al nacer, hace 15 días, declaró a Lannen Media el hombre, cuya identidad no fue revelada.
El hombre, un treintañero, cambió de sexo legalmente en 2015, tras años de tratamiento con testosterona. Pero decidió anular la cirugía de cambio de sexo con la que completaría su transición física para intentar tener un hijo con su marido.
La ley finlandesa estipula que una persona debe demostrar que es estéril para cambiar legalmente de sexo.
En la práctica, los centros médicos consideran que sus pacientes transgénero se vuelven estériles de facto cuando llevan a cabo un largo tratamiento con testosterona.
Pero si se suspende la terapia hormonal, la persona puede volver a ser fértil, como se vio con este excepcional nacimiento.
'¿Quiero que la sociedad me diga lo que puedo hacer con mi cuerpo y con mi vida? Nada me detendrá. Soy un hombre libre', afirmó durante su embarazo en una entrevista con el mayor diario finlandés, Helsingin Sanomat.
Finlandia es el único país nórdico que exige ser estéril a quienes quieren cambiar legalmente de sexo, lo que generó encendidas críticas por parte de organizaciones de defensa de los derechos humanos en los últimos años.
Al hombre se le concedió la baja por paternidad.