Tegucigalpa, Honduras
“¡Mi niña, eras mi vida y ahora qué voy a hacer sin vos. Dios, ayúdame, por favor, ayúdame!”
Sus sonrisas, travesuras y sus poses de modelaje para las fotografías que a diario le enviaban a sus padres ya no estarán más.
La pequeña Luciana Marbeli Bautista Caballero (3), residente en la colonia Centroamérica Oeste en Comayagüela, falleció el pasado domingo al sufrir un paro respiratorio.
Luciana tenía cinco días de estar con fiebres elevadas, por lo que el jueves sus familiares decidieron llevarla al centro de salud de la colonia, donde la inyectaron y les informaron que el efecto se vería en las próximas 48 horas, ya que tenía una amigdalitis o infección en la garganta.
El tiempo avanzó y la menor no mostraba mejoría y optaron por llevarla a una clínica privada, donde la inyectaron para la fiebre y les recomendaron otros medicamentos.
Según los familiares, desde el viernes la pequeña mostró decaimiento y solo quería estar en cama, misma condición presentó el sábado.
La abuela de la menor relató que en la madrugada del domingo notó que la niña tenía dificultades para respirar, trasladándola inmediatamente al hospital Materno Infantil.
“Le hicieron una radiografía y los doctores me dijeron que la niña tenía los pulmones lleno de pus y después la entubaron”, recordó la abuela mientras secaba las lágrimas que rodaban por sus mejillas.
“Ella (la niña) siempre andaba contenta, le gustaba platicar con las personas, no parecía que solo tenía tres años, era bien grande”, recordó.
La doliente dijo que los médicos les informaron que la pequeña sufrió un paro respiratorio que le causó la muerte.
El cadáver de la infante fue trasladado por las autoridades a Medicina Forense para determinar la causa de la muerte, ya que la abuela también dijo que la niña había estado jugando con frijoles la semana pasada y no sabían si se había tragado alguno.