San Pedro Sula, Honduras
Los recintos del centro penitenciario sampedrano que eran ocupados por la pandilla 18 y la MS-13 quedaron custodiados desde la tarde del miércoles para proceder con las inspecciones en busca de armas de fuego.
Según se confirmó, las dos áreas que eran exclusivas de los dos grupos serán demolidas, sobre todo la de la pandilla 18, la cual tiene una terraza en la cual los reos tenían su zona de vigilancia y eran vistos con fusiles y granadas. Lea además: Pandilla 18, la más violenta y sanguinaria
El complejo de los pandilleros era casi impenetrable hasta para las autoridades carcelarias, pero en esa zona en los últimos operativos han decomisado fusiles, granadas, dinero y drogas.
También la zona de los mareros de la MS-13 está acondicionada con lujos. Las autoridades militares encontraron muebles, camas, aires acondicionados y cualquier cantidad de lujos que les permitían comodidad. Le puede interesar: Las seis ideas equivocadas sobre la Mara Salvatrucha
Los recintos del centro penitenciario sampedrano que eran ocupados por la pandilla 18 y la MS-13 quedaron custodiados desde la tarde del miércoles para proceder con las inspecciones en busca de armas de fuego.
Según se confirmó, las dos áreas que eran exclusivas de los dos grupos serán demolidas, sobre todo la de la pandilla 18, la cual tiene una terraza en la cual los reos tenían su zona de vigilancia y eran vistos con fusiles y granadas. Lea además: Pandilla 18, la más violenta y sanguinaria
El complejo de los pandilleros era casi impenetrable hasta para las autoridades carcelarias, pero en esa zona en los últimos operativos han decomisado fusiles, granadas, dinero y drogas.
También la zona de los mareros de la MS-13 está acondicionada con lujos. Las autoridades militares encontraron muebles, camas, aires acondicionados y cualquier cantidad de lujos que les permitían comodidad. Le puede interesar: Las seis ideas equivocadas sobre la Mara Salvatrucha
El espectacular operativo para trasladar los reos de la cárcel de San Pedro Sula a El Pozo
Traslado
Autoridades hondureñas trasladaron este miércoles a 755 peligrosos pandilleros de la prisión de San Pedro Sula, en el norte del país, a la cárcel de máxima seguridad 'El Pozo', en el noroeste, anunció el presidente Juan Orlando Hernández.
El gobernante dijo que la cárcel de San Pedro Sula, la segunda ciudad del país, ha sido descongestionada con el traslado de 755 reos 'pertenecientes a la mara 18 y a la Mara Salvatrucha, por lo peligroso que se estaba volviendo su permanencia en el centro' sampedrano.
Indicó que al interior del centro penal 'ha habido una cantidad de hechos que no se podían permitir y creímos que estábamos a punto de enfrentar una crisis de consecuencias insospechadas con todo el armamento y equipo que ellos mantenían'.
+ Así era la vida de lujos de los reos en centro penal de San Pedro Sula
'Bien se pudo crear una fuga masiva y pudieron realizarse hechos violentos en contra de la población' de los alrededores de la cárcel 'y por ello se trasladaron hoy a estos 755 reclusos a El Pozo de Santa Bárbara', añadió.
El 17 de mayo del 2004 murieron en el penal de San Pedro Sula 107 reos, la mayoría miembros de la pandilla 18, a causa de un incendio. Pero la peor tragedia en las cárceles hondureñas ocurrió el 14 de febrero del 2012, cuando murieron 362 personas en otro incendio en la penitenciaría nacional de Comayagua, 50 km al norte de la capital.
La cárcel de San Pedro Sula, que se ubica en una zona cercana al centro de la ciudad, fue construida en los años 40 del siglo pasado para 800 reclusos, pero actualmente albergaba 3.227.
Las autoridades suponen que desde esa prisión se planificaban asesinatos, extorsiones, asaltos y otros delitos.
+Por boquete sacaron a los mareros de la cárcel
Las 24 cárceles de Honduras, consideradas 'bombas de tiempo' por las mismas autoridades, debido al hacinamiento, han experimentado una baja de tensión tras la construcción de dos nuevos centros penales, 'El Pozo' y otro en El Porvenir, unos 60 km al norte de la capital. Video: Cámaras captan a reos con armas en presidio
Organismos de derechos humanos, sin embargo, han cuestionado esa prisión, que empezó a ser utilizada en septiembre pasado, porque los reos permanecen confinados en celdas pequeñas, sin comunicación con el exterior, y con derecho a solo una hora de sol al día.