Provenientes de las penitenciarías de San Pedro Sula, Cortés y Támara en Francisco Morazán, 880 privados de libertad fueron trasladados este miércoles hasta el Centro Penitenciario de El Porvenir, Francisco Morazán, zona central de Honduras.
El Instituto Nacional Penitenciario en conjunto con la Fuerza de Seguridad Interinstitucional Nacional (Fusina), llevaron a cabo la operación de traslados desde los dos centros penales con mayor población carcelaria que, según informaron, ya no tienen integrantes de maras y pandillas.
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De acuerdo con las autoridades, desde la Penitenciaria Nacional de Támara se trasladaron 380 reclusos y 500 de San Pedro Sula, todos movilizados en autobuses penitenciarios y custodiados por elementos de Fusina.
Este centro penal tiene una capacidad para 1,800 personas, está conformado además con talleres en los cuales los privados de libertad tendrán la oportunidad de aprender distintos oficios.
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