Al departamento de
Olancho, en el oriente de Honduras, fue trasladado el cuerpo de la
niña de dos años que
fue asesinada y enterrada
por su padrastro en la aldea Las Marías,
Guaimaca, Francisco
Morazán.
En el libro de entrega de cuerpos de la
morgue
de Medicina Forense de la capital de Honduras se indica que el cuerpo de
Fhesly Vanessa Amador Varela fue entregado a las 11:00 PM a su abuelo Francisco Miranda
Ramírez.
El pariente de la desafortunada niña trasladó sus restos al municipio de San Francisco de Becerra, señala el escrito.
Por su parte, la madre de la infante declaró a los agentes de la Dirección Nacional de Investigación Criminal (DNIC) que el martes a las 7:00 PM se acostó a dormir en la misma cama con su pareja y la niña.
En horas de la mañana del miércoles, despertó y observó que su esposo estaba llorando, mientras la niña no se encontraba en la cama, por lo que le preguntó qué le pasaba y este le dijo que la niña había desaparecido.
La mujer le
contó
a sus familiares y vecinos, por lo que comenzaron a buscar a la menor mientras que un
tío
de esta llamó a la Policía.
Minutos después de iniciada la búsqueda, Elmer Isaí Ilías Soto confesó que “a la 1:00 de la madrugada la niña comenzó a llorar y que él se molestó, por lo que empujó a la niña y esta
cayó
de la cama al piso. Al caer, la niña golpeó la cabeza en el filo del piso y se hirió, del golpe la niña murió y él decidió enterrarla en el solar de la casa para ocultarla”, indica el informe de la DNIC.
Durante su declaración, el sujeto dijo que 'a veces el diablo se le mete a uno'.
Al escuchar la confesión del hombre, los agentes procedieron a detenerlo y a desenterrar el cadáver de la menor.
Audiencia
En los Juzgados de Letras de
Talanga se realizará al audiencia de declaración de imputado en contra de Elmer Ilías Soto, quien podría ser enviado a la cárcel por el delito de asesinato.
El sujeto confesó que asesinó a la niña porque no lo dejaba dormir.
En lo que va del año, este es el tercer caso que se registra en Honduras de salvajismo por parte de padrastros en contra de las menores, hijas de sus esposas.
El primer caso fue contra de una niña de dos años. Por la salvaje
golpiza
que sufrió la pequeña se encuentran
presos su madre y padrastro.
Luego se reportó el
maltrato en contra de una menor de quince años, a quien su padrastro habría intentado violar, según la acusación del Ministerio Público.
