Un intento de motín se registró esta mañana en el centro de rehabilitación de menores Renaciendo, ubicado en la comunidad de Támara, 15 kilómetros al norte de la capital de Honduras.
De acuerdo a información de la Dirección de Centros Penales, adolescentes que permanecen internos en dicho centro comenzaron a quemar mobiliario de la institución, en reclamo contra abusos de los que serían objeto por parte de sus propios compañeros.
Óscar Turcios, director del centro, confirmó que colchones y otros artículos fueron quemados en los módulos 5 y 6 del centro por los menores infractores.
Estos denunciaron que son víctima de extorsión por parte de adolescentes que pertenecen a pandillas, quienes según sus relatos les exigen 200 lempiras de 'impuesto de guerra'.
Turcios reveló que los miembros de pandillas atemorizan al resto de internos.
Los disturbios se registran por tercer día consecutivo en el centro Renaciendo. Hasta el momento no se reportan heridos ni fugas.
Mientras en el centro de internamiento Sagrado Corazón, aledaño a Renaciendo, las menores también protagonizaron una revuelta exigiendo que se reactiven las visitas.
Padres de familia de las jovencitas llegaron al lugar en espera de ingresar, por lo que las autoridades autorizaron visitas de cinco minutos por persona.
Para garantizar la seguridad en la zona, elementos de la Policía Nacional permanecen apostados en los alrededores de dichos centros.
