Los altos mandos de la Policía Militar del Orden Público (PMOP) y otras unidades de investigación realizan las pesquisas en torno a un incidente que se registró el miércoles en el anillo periférico, donde un elemento de la institución armada le disparó a un microbús, lo que dejó el saldo de cuatro pasajeros heridos.
El percance ocurrió alrededor de las 8:00 de la mañana, a la altura de la represa Los Laureles, cuando el microbús rapidito de los denominados “brujos”, color beige, con placas PDG-0344, conducido por Olger Francisco Zepeda Carranza, circulaba desde la colonia Quezada en su recorrido por el periférico, repleto de pasajeros.
La información preliminar que se manejó es que antes de llegar a un puente había un retén de la Dirección General de Transporte (DGT), donde estaban cuatro policías militares y un inspector, quienes le hicieron señal de parada al conductor, sin embargo, él habría desobedecido la orden.
Al ver que el conductor desacató una orden y continuó la marcha, uno de los uniformados le disparó con el fusil y el proyectil impactó en el vidrio trasero.
El tiro alcanzó a dos de los pasajeros, mientras que otros dos resultaron con heridas leves, presuntamente causadas por las esquirlas del cristal.
Los heridos de bala fueron identificados como Geovany Alexander Reyes Ardón y Martha Elena Quiroz, quienes fueron trasladados al Hospital Militar en una patrulla de la PMOP a recibir la atención médica oportuna.
Los otros fueron llevados al Hospital Escuela Universitario (HEU) con lesiones leves, según dijo un testigo.
Altos mandos de la institución armada, así como técnicos de la Dirección Nacional de Investigación Criminal (DNIC), se presentaron al lugar a realizar las diligencias preliminares orientadas a esclarecer el caso.
Mientras tanto, el policía militar responsable del hecho fue detenido para ser presentado ante el juzgado competente.
Versión de los protagonistas
El motorista Zepeda Carranza relató que él bajaba la pendiente con procedencia de la colonia Arturo Quezada en el momento que inspectores de la DGT instalaban un retén y le hicieron señal de parada, pero que no pudo contener el vehículo.
Agregó que “cuando pasé dispararon por atrás” y que el saldo fue de cuatro pasajeros heridos.
Prosiguió diciendo que en el carril por donde circulaba había cuatro militares y un inspector de la DGT, e igual cantidad en el lado contrario, pero que él no pudo detenerse justo en el retén porque el microbús venía con impulso.
“Que se pongan la mano en la conciencia, porque uno anda ganándose el pan de cada día, uno no anda robando, uno anda trabajando”, expresó.
Detalló que una muchacha llevaba una herida a lado del ojo, mientras que al varón el disparo le atravesó los costados. Los otros dos resultaron con rasguños producto de los vidrios.
Por su parte, una joven que viajaba como pasajera manifestó que “gracias a Dios no hay muertos, pero el hecho de que haya heridos es una situación difícil”.
Confirmó que el rapidito iba repleto de pasajeros y que, afortunadamente, no hubo víctimas mortales. Aparentemente en la unidad también iban niños.
Bajo investigación
El jefe de la PMOP, coronel de caballería German Velásquez Romero, dijo que el caso está en proceso de investigación con el fin de verificar si el policía militar cometió un delito porque la orden que ellos tienen es no disparar contra los vehículos civiles, especialmente los que transportan personas.
El oficial confirmó que el uniformado, de quien dijo desconocer el nombre, está detenido y bajo custodia y se sigue la investigación para ver qué fue lo que realmente ocurrió.
“Si él (policía militar) cometió algún delito va a ser puesto ante los juzgados correspondientes”, expresó.
EL HERALDO se comunicó con el portavoz de Fusina, Santos Nolasco, para conocer el nombre del policía militar implicado, pero dijo que “por cuestiones legales” no podía revelar el nombre.
Por su parte, Velásquez Romero dijo que los soldados tienen el entrenamiento necesario para llevar a cabo estas operaciones y que, desafortunadamente, incidentes como este ocurren, “y el día de hoy cuatro compatriotas resultaron heridos”.
El oficial aseguró que solamente fue un disparo del policía militar y que se seguirá el procedimiento correspondiente y, si es necesario, será puesto a la orden del juzgado competente.
A la escena se presentaron dirigentes de transporte y varios motoristas de los “busitos brujos”, quienes condenaron el ataque armado contra la unidad del servicio urbano.
El dirigente Pompilio Coello condenó el hecho de que hayan disparado contra una unidad que transporta personas, lo que calificó como una persecución.
