Transcurría la madrugada en total calma en la Jefatura Policial Número 7 de Danlí, cuando de repente una mujer a punto de dar a luz llegó para solicitar auxilio.
La señora Ana Lizeth Palma, de 34 años, según el clase I Osmin Fiallos, llegó justo en el momento en que él junto a tres compañeros más regresaban de un recorrido de rutina.
“De un momento a otro, y de entre la oscuridad, apareció caminando la señora embarazada”, por lo que se le brindó el saludo de buenas noches, “pero ella no respondió”.
Los agentes, pese a que no recibieron respuesta ante el saludo, aseguran que decidieron quedarse unos minutos fuera del edificio policial, y fue esa decisión la que los llevó a notar que la fémina presentaba algún problema.
“Ella caminaba de manera extraña y nos acercamos para ver que le sucedía y de inmediato supimos que era que presentaba los dolores de parto”, reveló Fiallos.
En ese momento se le recostó a la parturienta en una colchoneta de las mismas donde descansan los efectivos para luego subirla a la cabina del vehículo policial PN 516, con la finalidad de conducirla al Hospital Gabriela Alvarado.
En apenas 10 minutos, los agentes policiales atravesaron la ciudad con el fin de llevar a Palma al sanatorio, pero unos dos kilómetros antes de llegar una bebé rompió en llanto, el momento justo cuando llegó al mundo.
Pese a que la niña había nacido la marcha de la patrulla policial no se detuvo hasta llegar al centro asistencial, donde ambas fueron atendidas por los médicos de guardia.
Lo primero que realizó el personal médico que salió fuera del centro hospitalario para auxiliar a la mujer y su pequeña fue el corte del ombligo para luego ingresarlas a la sala de labor y parto.
Salvador Díaz, médico de guardia, explicó que el estado de salud de ambas es estable, pero permanecerán internas durante dos días por vigilancia.
“La niña se mantiene en constante vigilancia con el fin de evitar que pueda desarrollar una infección”, dijo el entrevistado.
Díaz comentó que la madre no había acudido a ningún control prenatal durante el tiempo de gestación, por lo que se ha tomado la decisión de que permanezca en el centro asistencial.
La señora es originaria de la aldea de Villa Santa, y aseguró que en la actualidad es madre soltera, pues su compañero de hogar la abandonó hace unos meses atrás.
