Tegucigalpa, Honduras
¿Le ha pasado que después de beber leche siente malestares estomacales e intestinales? Si este caso es recurrente en usted, es probable que sea intolerante a la lactosa.
Para saber más sobre los síntomas, que pueden variar en cada persona, consultamos a la especialista en nutrición Jisel Godoy Ham, quien detalla cuáles son las características y las causas de este padecimiento.
Conozca más sobre la intolerancia a la lactosa
Antes de ahondar más sobre este tema, es necesario definir qué es la lactosa. Este es el tipo de azúcar de la leche que se descompone con otros dos azúcares más simples -la glucosa y galactosa-.
Cuando la lactosa llega al intestino delgado, la enzima lactasa actúa sobre la lactosa que se encuentra en los alimentos ingeridos, dividiéndola en las dos moléculas que la componen con el fin de que puedan ser absorbidas, digeridas y transportadas a través del torrente sanguíneo.
De la incapacidad de digerir cantidades normales de lactosa surge la intolerancia a este azúcar.
El malestar se presenta mayormente en los adultos porque no poseen suficiente lactasa en su organismo, de manera que cuando consumen algún alimento lácteo, se le presentarán una serie de dificultades para digerirlo con normalidad, enfatizó la nutricionista.
Las personas pueden desarrollar pocos síntomas o un conjunto amplio de ellos, todo dependerá del organismo. Godoy detalló que los síntomas se producen cuando la lactosa no es absorbida en el intestino delgado que debe llegar al colon, donde es fermentada por las bacterias intestinales y por esta razón se produce flatulencia, hinchazón, cólicos y diarrea.
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La especialista aconseja a las personas con este problema que disminuyan el consumo de los lácteos sin eliminarlos del todo, fundamental para mantener un correcto estado de salud de los huesos, ya que son los alimentos con mayor concentración de calcio.
Para las personas que tienen sospechas de que están sufriendo de intolerancia a la lactosa, nuestra experta recomienda que se realicen las pruebas necesarias para determinarlo.
Estos exámenes ayudarán a medir la capacidad que tienen los intestinos para la descomposición de los lácteos.
