Entre el espacio abierto en medio de la espesura del bosque y el intenso sol de una tarde, el “pájaro de hierro” desciende del cielo lleno de narcóticos.
Más de 700 kilos de cocaína fue la ilegal carga que transportaba una aeronave hasta la comunidad de Belén, La Mosquitia, frente a la laguna de Ibans, a plena luz del día.
Esta maniobra, efectuada en 2009, se grabó en video por agentes especiales infiltrados como parte de una operación encubierta de una institución antidrogas del Estado y la Unidad Investigativa de EL HERALDO
tuvo acceso exclusivo al material fílmico. Usted también puede ver las impresionantes imágenes accediendo al www.elheraldo.hn.
El video está divido en cinco fragmentos que denotan, paso a paso, el método que usan los traficantes para meter droga en estas zonas mediante el uso de aviones.
El alucinógeno, tras ser bajado del aeroplano en el barrio Buenos Aires, se transportó hasta un barco ubicado cerca de la playa de esa localidad por los narcotraficantes, pero la transacción no se culminó debido a que elementos de la Fuerza Naval interceptaron el navío y realizaron una masiva captura de sospechosos.
La Unidad Investigativa de EL HERALDO
también tuvo acceso al informe escrito que la agencia realizó y en el que de forma detallada se narra cómo sucedió el aterrizaje de la narcoavioneta, la intercepción de la droga y el arresto de supuestos implicados en la fallida operación.
Aterrizaje
El 23 de julio de 2009, aproximadamente a las 4:20 de la tarde, aterrizó en una pista ubicada en la comunidad de Belén, una avioneta bimotor, color blanco, matrícula PT1DP, con bandera venezolana.
En el primer video se observa cuando la aeronave toca suelo y a medida que avanza en la planicie llena de grama desaceleran las dos hélices.
Al menos nueve personas se observan a la orilla de la pista, una de ellas pasa en una bicicleta y otra se ve montada en una cuatrimoto.
“Una vez que la avioneta aterrizó en la pista, fue rodeada por hombres fuertemente armados con fusiles AK-47, los que comenzaron a disparar para atemorizar a pobladores que no estaban de acuerdo con lo que ellos hacían”,se explica en el informe.
Otros hombres fuertemente armados también se encontraban en la pista para vigilar la droga que fue movida de la avioneta al carro, de acuerdo con el relato del informe.
Luego, en un segundo video, aparece la avioneta a un costado de la pista y enfrente de la aeronave se encuentra un vehículo pick-up todo terreno en el que se coloca la cocaína.
Grupos de personas pasan a la distancia y no se muestran nerviosos si no que, al contrario, caminan tranquilos observando el trasiego, como si el acarreo de droga fuera algo cotidiano en el lugar.
Cuando la droga fue cargada en el automóvil, en el que también se movilizan varias personas, este sale de la pista detrás de dos tipos que se conducen en una motocicleta.
En los dos últimos videos queda evidenciado la forma en que los narcotraficantes se deshacen de evidencias al quemar la narcoavioneta.
Decenas de personas se acercan a observar la destrucción del aparato que en minutos queda consumido por las llamas. Los resto de la avioneta calcinada finalmente fueron tirados al mar.
Identifican cabecillas
“La persona que se encargó de coordinar la llegada de la avioneta, así como de preparar la pista fue una persona identificada como Edgardo conocido con el
alias “Mandarino”, un misquito de origen nicaragüense, exbuzo lisiado, quien trabajaba para otro narco hondureño llamado Reynaldo (Alias) “Toro”, dueño de un bote pesquero llamado Capitán Toro”, se asegura en el informe.
A renglón seguido el escrito detalla que Reynaldo, además contrató a una persona de apellido Valladares para que se encargara de transportar la droga desde la pista hacia la playa en su vehículo 3.0 y en el de otros pobladores de la zona.
La investigación también establece que Edgardo contrató a varios pobladores de Belén para preparar la pista y posteriormente quemar la avioneta. A estas personas se les pagó 60 dólares a cada una por ese trabajo.
Mientras, Reynaldo se encargó de otras actividades logísticas para que el tráfico se realizara sin contratiempos.
En ocasiones, los videos se ven movidos, producto de que la cámara que se utilizó estaba oculta, al tiempo que otras tomas se hicieron detrás de una malla ciclón. El siguiente paso de la operación era mover la droga hacía un barco para luego entregarla a un punto no especificado.
“Celebración a lo narco”
El sábado 18 de julio (cinco días antes del aterrizaje de la narcoavioneta) Reynaldo mandó a destazar una res en la casa de Edgardo alias “Mandarino”, y la repartieron entre los pobladores de las comunidades cercanas, con el propósito de tener siempre a estas personas de su lado.
El informe describe que esta actividad fue una “celebración a lo narco” como sucede en muchas oportunidades en las que los traficantes quieren ganarse el respaldo de los habitantes donde trafican droga para que no los delaten.
Asimismo, Edgardo pidió a los “alcaldes auxiliares” de las comunidades cercanas a Belén que elaborara una lista de personas de sus comunidades con la finalidad de entregarles una cantidad de dinero a cambio de silencio.
Colón y Gracias a Dios son zonas en donde existe mayor actividad de tráfico de drogas. Este sector, por los distante, es propicio para el aterrizaje de avionetas cargadas de droga.
EL HERALDO
publicó un informe de las Fuerzas Armadas de Honduras en el que se identifican nueve pistas clandestinas utilizadas el aterrizaje de narcoavionetas.