Comayagüela, Honduras
La violencia no da tregua a los centros de estudios en la capital de Honduras.
En los últimos días dos estudiantes del Instituto Central Vicente Cáceres han sido asesinados, sin que hasta el momento se capture a los responsables.
De 2014 a la fecha seis alumnos de la institución han sido asesinados.
Las amenazas continúan, de acuerdo con las autoridades del centro de estudios, quienes revelaron a EL HERALDO que supuestos delincuentes al salir del centro de estudios interceptan a los alumnos.
“Todos los problemas se dan en las afueras del instituto, a la hora de salida, en la tarde frente al portón principal se estacionan vehículos y sus conductores quieren llevarse a las estudiantes, también en la terminal de buses los estudiantes sufren amenazas”, reveló una de las máximas autoridades del centro estudiantil.
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El viernes anterior, según se informó a EL HERALDO, tres estudiantes, al cruzar el puente peatonal cercano al centro escolar, fueron detenidos por un supuesto grupo de delincuentes.
Al interceptarlos obligaron a uno de ellos a levantarse la camisa para conocer si portaba algún tatuaje y a los otros dos les pidieron los celulares y les revisaron las imágenes y mensajes, pero nunca les informaron la causa de tal acción.
“A raíz del problema con la estudiante (Rebeca Torres, asesinada) la semana pasada, las amenazas han incrementado”, de acuerdo con el personal del colegio.
Para los más de 4,300 estudiantes que asisten de manera presencial los últimos acontecimientos les mantienen en zozobra.
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En la zona permanecen dos agentes de Policía Nacional de manera permanente, pero para los educandos y maestros no es una medida que les genere tranquilidad.
“En la entrada principal no tenemos problemas, pero en las cercanías es donde no existe vigilancia y los estudiantes son intimidados de varias formas, se necesita más seguridad alrededor” aseguran los educadores.
También se informó a EL HERALDO que en el interior del centro educativo se han registrado situaciones de peligro, luego que antisociales soliciten a estudiantes la toma de fotografías de otros alumnos, y que de no hacerlo son amenazados con que tendrán graves consecuencias.
De acuerdo con las autoridades de la institución de esta manera los supuestos delincuentes tratan de crear perfiles de los jóvenes.
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Pese al temor un grupo de alumnos y padres de familia al inicio de esta semana realizaron un plantón en el centro educativo para exigir a las autoridades esclarecer las muertes de los últimos estudiantes, ya que eran considerados alumnos destacados.
Con globos blancos y mensajes en carpas los estudiantes recordaron la memoria de Rebeca Torres, aunque la concurrencia fue escasa por el miedo que reina en la institución de segunda enseñanza.
Vigilancia
Para tratar de evitar hechos delictivos, elementos de la Policía Militar de Orden Público (PMOP) han comenzado a realizar patrullajes.
Mario Rivera, vocero de la PMOP, recomendó a las autoridades del centro escolar solicitar reforzar la seguridad.
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