Tenía planeado viajar para reencontrarse con su familia en Costa Rica, de donde es originario, pero la violencia acabó con sus planes. Y es que unos dos meses atrás fue víctima de un robo, luego de que delincuentes rompieran uno de los vidrios de su automóvil y le extrajeran hasta su maleta de viaje.
“De ese día recuerdo que me despedí de mi esposa, ya que había planeado viajar a mi tierra natal, Costa Rica”.
Minutos antes de tomar un avión, “Javier” decidió cortarse el cabello en la barbería que ha frecuentado desde que reside en el país. Es un local que además está cerca de su trabajo, por lo que nunca imaginó que la zona era insegura.
Al llegar al establecimiento buscó un espacio en la acera para aparcar su automóvil y entró al local sin ningún temor.
“A los pocos minutos, una persona me llamó para decirme que habían quebrado la ventana de mi vehículo y que se habían llevado mi ropa, computadora y documentos personales, entre ellos el pasaporte”.
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Al conocer el hecho, “Javier” aseguró que estuvo por unos segundos inmóvil, tratando de asimilar la triste noticia de haber perdido sus pertenencias.
“En ese momento no sabía si salir o quedarme esperando a las autoridades policiales”. Y es que en segundos “Javier” se había sumado a las víctimas de asaltos de la ciudad.
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Según las autoridades del 911, en el último año, a través de las Unidades Metropolitanas de Prevención (Umep), se reportaron 2,783 casos de robo en la capital.
Santos Ochoa, director de la Umep-3, informó que a diario realizan patrullajes en los distintos barrios y colonias de la capital con el fin de evitar estas situaciones.
“Recibimos reportes y acudimos a las zonas donde nos han denunciado el problema, es parte de nuestra labor”, dijo Ochoa.
Pero en esta ocasión no sucedió así con el caso de “Javier”, ya que en el sector no se presentó ningún uniformado, pese a haber solicitado ayuda.
“Al acudir a las oficinas de la Policía creció mi impotencia, pues lo que hicieron fue recomendarme que me comprará un arma para defenderme de otro atraco”.
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