Casi 14 mil policías denunciados por cometer faltas en los últimos cinco años
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Tegucigalpa, Honduras.- El subinspector García fue separado de la Policía Nacional por delitos que fueron comprobados por el Ministerio Público (MP), pero aun así fue contratado como agente de la Policía Municipal, en la alcaldía del Distrito Central, donde estafó y acosó a varias compañeras de trabajo.
El ahora exagente había sido condenado, pero interpuso un recurso de casación que le permite defenderse en libertad, no obstante, sigue cometiendo estafas y abusos en contra de ciudadanos, aprovechándose de su formación como oficial.
Una de las víctimas, quien pidió el anonimato, contó a EL HERALDO Plus, con sus manos temblorosas y la voz entrecortada, el abuso que vivió de García, cuando fue su pareja. Por miedo no lo acusó, hasta que un día acudió a la Dirección Policial de Investigaciones (DPI), pero no le quisieron tomar la denuncia, aduciendo que ya había pasado mucho tiempo y no tenía suficientes evidencias.
Asustada, indecisa y con los ojos lacrimosos, la jovencita contó que confió en el hombre, quien fue uno de los encargados de “servir y proteger” a la ciudadanía, pero que al final la estafó y la dejó hospitalizada, con moretones en la cara debido a las golpizas que le propinaba, mostrando fotografías como evidencia.
Datos de la Dirección de Asuntos Disciplinarios Policiales (Didadpol), proporcionados a EL HERALDO Plus por medio de la solicitud de información SOL-DIDADPOL-131-2024, establecen que en los últimos cinco años (desde 2020 hasta septiembre de 2024), recibieron 13,990 denuncias por diferentes faltas contra de agentes policiales.
El promedio de quejas contra agentes policiales oscilan entre 2,000 y 3,000 por año. La Didadpol tiene plazos cortos para investigar y sugerir que los sancionen, y en el peor de los casos, que sean depurados de la institución.
Para el año 2020, la Didadpol registró 2,021 denuncias, entre graves y muy graves, aunque muchas veces se combinaban las faltas.
Para 2021 sumaron 3,156, pero en el 2022 llegaron a 3,086, y un año después, en 2023, aumentaron a 3,102. Hasta septiembre de 2024 ya sumaban 2,625.
En el caso de García, ya depurado, por su experiencia consiguió trabajo como Policía Municipal, entablando una relación amorosa con una de sus compañeras a la que motivó emprender un negocio.
La jovencita, creyendo en el exagente, solicitó un préstamo de aproximadamente 200 mil lempiras y se los entregó, pero nunca recibió una retribución del negocio que le prometió García.
El expolicía gastó el dinero y cuando su entonces pareja le cobraba lo que recibía eran golpizas, dejándola completamente moreteada. Ese caso no fue el único, también fue denunciado por varios empleados municipales por acoso sexual en el trabajo, por lo que fue separado de la municipalidad. Ahora labora en una agencia de seguridad privada en el sur de Honduras.
EL HERALDO Plus consultó a las autoridades de Didadpol sobre el procedimiento en estos casos, sin embargo, cuando el agente ya fue separado de la Policía, la denuncia no se interpone en esa institución, sino ante el Ministerio Público (como un ciudadano común).
Los datos de la Didadpol también evidencian que entre los años 2020 a septiembre de 2024 los departamentos donde más faltas en contra de los agentes se denunciaron fueron: Francisco Morazán con 5,328, seguido de cortés con 2,221, en Yoro se contabilizan más de 800 y 679 en El Paraíso, mientras que en Gracias a Dios es donde menos denuncias reportaron con 116.
Los municipios donde más denuncias en contra de policías se registraron fueron el Distrito Central con 4,719 y San Pedro Sula con 1,403 casos. En la lista siguen otras ciudades importantes, como Comayagua, Danlí, La Ceiba, Choluteca, Santa Rosa de Copán, El Progreso, Choloma, Puerto Cortés, entre otras.
De acuerdo con las cifras, la denuncias contra los uniformados han tenido importantes incrementos desde 2021, cuando sumaron 3,156 casos, 1,135 más que el año anterior, pera el año 2022 hubo una leve disminución de 70, luego en 2023 aumentó 16 casos más y este año la proyección es alta.
La sección III de la Ley de la Carrera Policial en los artículos del 106 al 109 menciona las faltas que cometen los agentes, clasificándolas en leves, graves y muy graves, misma que pueden tener sanciones internas, responsabilidad penal y la separación de la institución policial sin sus derechos laborales.
Entre las faltas leves más cometidas, según la Didadpol, está la 107 numeral 4, que es eludir el saludo a los superiores o no contestarlo, la 107 numeral 5, que es llegar tarde injustificadamente hasta por dos horas a su lugar de asignación y la 107 numeral 6, que consiste en uso de celular durante acciones operativas sin justificación
No obstante, la falta más cometida, según los registros, son la 107 numeral 7, que es trato descortés o inculto con el público, sus superiores, compañeros o subalternos, mediante palabras, gestos, malos modales, actitudes o réplicas irrespetuosas.
Las faltas graves están contempladas en el artículo 108 y las más cometidas son las contempladas en el numeral 2, que es excederse en el plazo de un asueto o licencia sin autorización hasta por 24 horas; el numeral 4, que es el descuido o negligencia en el uso o manejo de las armas, maquinarias, equipo, vehículos o materiales asignados.
De igual forma, el numeral 5 habla sobre el incumplimiento injustificado de una orden transmitida por la autoridad competente, siempre y cuando la misma no constituya ilícito.
El numeral 12, sobre no presentar en los plazos previstos en la Ley la declaración jurada de bienes ante el Tribunal Superior de Cuentas (TSC).
También las faltas establecidas en el numeral 14, sobre impedir o limitar que las personas puedan ejercer libremente sus derechos; la 15, que corresponde al maltrato físico contra personas, y el numeral 18, sobre el maltrato verbal o psicológico contra sus superiores, subalternos o compañeros de carrera o servicio policial y otras personas dentro o fuera del servicio.
Las faltas muy graves están contempladas en el artículo 109 de la misma ley, entre las más cometidas está la del numeral 35, que es no presentarse a sus labores por tres días consecutivos sin causa justificada.
La 44, que es no dar cumplimiento a lo establecido en los respectivos reglamentos y manuales para la realización de operaciones y actividades policiales, y la 45, sobre obtener dos evaluaciones de idoneidad consecutivas con puntaje no satisfactorio.
Asimismo, el numeral 46, sobre las actuaciones arbitrarias o discriminatorias por cualquier causa que afecten las libertades ciudadanas, la dignidad de las personas o los derechos humanos.
Otra de las más frecuentes es la numeral 26, sobre solicitar o aceptar a su nombre o de terceros cualquier gratificación, beneficio o regalo de personas naturales o jurídicas a cambio de facilitar la comisión de ilícitos por su acción u omisión.
También está dentro de las faltas muy graves más cometidas, el uso indiscriminado, innecesario o excesivo de la fuerza en el desempeño de sus labores, conforme lo establecido en la reglamentación respectiva.
La Secretaría de Seguridad informó a EL HERALDO Plus que entre el año 2020 a septiembre de 2024 había depurado un total de 4,153 agentes, que representan alrededor del 30% del total de las denuncias interpuestas ante la Didadpol, mismas que suman 13,990.
Esto significa que tres de cada diez agentes denunciados ante la Didadpol han sido depurados por la Secretaría de Seguridad entre los años 2020 a septiembre de 2024.
Omar Rivera, exmiembro de la Comisión Especial para la Depuración y Transformación de la Policía Nacional de Honduras, consideró que es esencial fortalecer y especializar la institucionalidad pública para dar seguimiento efectivo a las denuncias.
Esto implica crear unidades capacitadas en instituciones como el Ministerio Público (MP), y el TSC, a fin de transformar las denuncias en pliegos de responsabilidad y, en el ámbito penal, formular requerimientos fiscales sólidos.
Rivera consideró que también es crucial implementar pruebas de confianza, como evaluaciones toxicológicas, polígrafos y revisiones patrimoniales, para monitorear el comportamiento de los agentes y oficiales policiales.
Recomendó fortalecer la Dirección de Asuntos Disciplinarios Policiales, la Dirección de Inteligencia Policial, la Dirección de Recursos Humanos y la Inspectoría General de la Policía Nacional, para tener un control preventivo más efectivo de los agentes.
De igual forma, precisó que “la acción preventiva es tan importante como la sanción de actos ilícitos, garantizando así que los miembros de la Policía Nacional sean idóneos para su labor”.
La subsecretaria de Seguridad, Julissa Villanueva, cuestionó los recientes ascensos de la Policía Nacional, indicando que muchos de esos oficiales de cúpula que hoy ascienden han participado en actos deshonestos, irregulares y han sido colaboradores de la criminalidad organizada.
“Honduras precisa de una verdadera depuración policial. Basta con investigar un poco quién promovió esta lista, y se encontrarán muchos de los mismos facilitadores y colaboradores que, en el pasado y presente, transformaron a nuestro país en un narcoestado”, señaló.
Además, la Didadpol ha evidenciado poca o nula capacidad para realizar investigaciones más enérgica, como los policías extorsionadores de migrantes que denunció la Unidad Investigativa de EL HERALDO Plus en 2023. Por este caso fueron detenidos cuatro agentes, aunque se desconoce qué medidas tomaron y cuál fue el procedimiento aplicado.
Además, las pruebas de confianza no las realiza la Didadpol directamente, sino que la misma Policía Nacional, pese a que ese es el control más inmediato que se puede tener de los agentes.