Jugadores y directivos del fútbol hondureño que han tenido problemas con la justicia

A lo largo de los años, los nombres de muchos futbolistas y dirigentes deportivos han triunfado en la primera división de Honduras, sin embargo, algunos de ellos han tenido que ver cómo se empañó debido a problemas legales que a algunos de ellos les implicó tener que permanecer detenidos en prisión.

Fotos: El Heraldo | Cortesía

Júnior Morales, recordado exarquero de varios equipos del fútbol hondureños, fue detenido en San Pedro Sula en febrero de 2018 luego de que en un retén policial se comprobara que el cancerbero se conducía a bordo de su vehículo en estado de ebriedad.

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El portero hondureño Robin Tomás Meléndez fue acusado e julio de 2003 de haber matado de un golpe en la cabeza a su compañero de equipo, Jorge Alberto Espinoza. En el juicio Meléndez señaló que los jugadores comenzaron a bromear por la posesión de una pluma y concluyeron con insultos y golpes. Finalmente, el exarquero de clubes como Platense y Real España fue condenado a 10 años de prisión.

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José Mendoza, actual tercer portero del Olimpia, fue sentenciado en Guatemala a cuatro años de prisión por el delito de agresión a un jugador de las fuerzas básicas del Xelajú.

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Marcelo Santos, actual defensor del Motagua y la Selección de Honduras, en noviembre de 2016 fue detenido junto a nueve personas en La Ceiba luego de que se les encontrara droga. El futbolista hondureño posteriormente pudo recobrar su libertad tras el amargo momento.

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Maynor Suazo, exjugador de la Selección de Honduras, fue detenido por la Policía Nacional en 2015 por conducir en estado de ebriedad.

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Jorge Campbell, exjugador del Atlético Choloma, fue detenido en noviembre de 2016 por el delito de robo y asalto a mano armada.

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Nahún Güity, exjugador de clubes como Olimpia, Victoria y Vida, fue detenido por las autoridades al ser acusado del delito de violación especial en perjuicio de una menor.

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Carlos Páez de Oliveira, exfutbolista del Platense, fue detenido en el 2007 al conducirse junto a su cuñado en un vehículo con placas “hechizas”.

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Javier Hernández, expresidente del Atlético Choloma, fue detenido en el 2015 por portar de manera irregular un total de 14 mil dólares. El dirigente deportivo fue liberado por las autoridades horas después.

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Denovan Torres, portero de los Lobos UPNFM, años atrás fue denunciado por su expareja por el delito de violencia doméstica. El guardameta tuvo que pasar 24 horas en prisión.

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Durante la pandemia del covid-19, una de las noticias que causó mucha conmoción en la Liga Nacional fue la detención de Rubilio Castillo por violencia doméstica contra su esposa. El ariete hondureño pasó 24 horas en la cárcel luego de haber sido aprehendido por las autoridades.

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Durante el confinamiento por la pandemia en Honduras, Henry Figueroa fue detenido por la Policía Nacional al incumplir con el toque de queda impuesto por aquel entonces.

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Samuel Caballero, uno de los históricos del fútbol hondureño, fue denunciado por su pareja por violencia doméstica hace algunos años. El exdefensor fue visto en los juzgados en varias oportunidades.

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Luego de disputar partidos de Concachampions en 2020, Javier Portillo fue detenido a su regreso a Tegucigalpa por agentes de la Interpol, el motivo de la aprehensión fue una denuncia por violencia intrafamiliar interpuesta por Jhenssy Belinda Turcios Gálvez.

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En 2022, Wilson Palacios fue detenido por el delito de violencia doméstica en Estados Unidos. El exjugador catracho pudo evitar la prisión al haber pagado una fianza.

En 2015, Brayan Beckeles fue denunciado por su pareja por el delito de violencia doméstica.

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Jorge Claros, mundialista con Honduras en Brasil 2014, fue arrestado en 2019 luego de ser denunciado por violencia doméstica en contra de su esposa. “El Pitbull” fue hallado culpable en febrero de 2020, quedando obligado a pagar una multa de 16 mil lempiras y además tener que recibir atención psicológica.

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