“El Negro” Lobo recuperará su libertad en agosto de 2023
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TEGUCIGALPA, HONDURAS.- El primer narcotraficante hondureño extraditado a Estados Unidos está a las puertas de recobrar su libertad.
Se trata de Carlos Arnoldo “El Negro” Lobo, de 47 años, que fue entregado por las autoridades hondureñas a la justicia estadounidense hace nueve años.
En septiembre de 2014, tras declararse culpable de cargos de narcotráfico, Lobo fue condenado a 20 años de reclusión.
No obstante, su declaración de culpabilidad de un delito federal permitió la aplicación de la Ley de Sentencias de EE UU, favoreciéndolo con una nueva y menor condena.
“Sentencia modificada: El acusado -Carlos “El Negro” Lobo- queda bajo la custodia de la Oficina de Prisiones de Estados Unidos a ser encarcelado por un período total de 127 meses. El acusado recibirá crédito a partir de su fecha de arresto original del 27 de marzo de 2014”, señala la orden dictada por el juez Darrin Gayles.
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Documentos oficiales de la Corte Federal del Distrito Sur de Florida y firmados por el juez Gayles, a los que tuvo acceso exclusivo EL HERALDO, revelan que “El Negro” Lobo saldrá de prisión el 3 de agosto de 2023, tras cumplir su castigo.
El Buró Federal de Prisiones de Estados Unidos también reconfirma que Lobo saldrá de prisión en esta misma fecha.
Es decir que la sentencia dictada contra el hondureño se redujo en un cincuenta por ciento en comparación con la que inicialmente había sido condenado. Una vez que salga de prisión, “El Negro” Lobo será entregado a la custodia del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas de EE UU para procedimientos de expulsión de conformidad con la Ley de Inmigración y Nacionalidad.
Operativo
Fue exactamente la noche del 9 de mayo de 2014 cuando dos helicópteros militares estadounidenses aterrizaron en el Primer Batallón de Infantería -donde estaba recluido Lobo- y se lo llevaron a la base aérea de Palmerola.
Esa misma noche, un jet de la Agencia Antidrogas de Estados Unidos (DEA) extraditó a Lobo a Florida para responder por una acusación criminal emitida por la Fiscalía el 19 de abril de 2011.
En junio de 2011, “El Negro” Lobo fue calificado por la jueza Úrsula Ungaro como prófugo de la justicia. Sin embargo, en ese entonces no estaba vigente una reforma constitucional que permitía la entrega de connacionales.
En enero de 2012, el Congreso Nacional -cuyo titular en ese momento era Juan Orlando Hernández, quien fue extraditado y enfrenta cargos por narcotráfico en EE UU- reformó el artículo 102 para permitirle al Poder Ejecutivo negociar y suscribir tratados internacionales para poder extraditar hondureños implicados en el tráfico de drogas, terrorismo o crimen organizado.
A partir de ese momento ingresaron a la Corte Suprema de Justicia una serie de solicitudes de extradición que se materializaron hasta en marzo de 2014, con la captura de “El Negro” Lobo.
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El poderoso narcotraficante fue sorprendido mientras recorría las calles de una residencial en San Pedro Sula a bordo de una camioneta de lujo. En sandalias, camisetas y calzoneta, Lobo fue trasladado hasta el alto tribunal de justicia para conocer los cargos por los que Estados Unidos lo reclamaba.
La defensa del hondureño agotó todos los recursos a fin de frenar la extradición, no obstante, fueron rechazados y en días posteriores la justicia hondureña ratificó su entrega a la DEA.
Conspiración
Durante varios años, “El Negro” Lobo coordinó una gran red de tráfico de drogas hacia Estados Unidos. Las investigaciones revelan que Lobo tuvo su centro de operaciones en La Ceiba y Esparta, Atlántida
.Según las investigaciones de la DEA, la red de Lobo coordinó el contrabando de cocaína por barcos desde Colombia y Ecuador a Panamá y Honduras, luego a Guatemala y otros países, incluidos México y Estados Unidos.
“Como propietario y operador de varias docenas de embarcaciones, controlaba los envíos de drogas hacia y desde la costa este de Honduras”, indica la acusación.
La conspiración de narcotráfico en la que estuvo involucrado “El Negro” Lobo sobrepasa los 450 kilogramos de cocaína. “El arresto y la sentencia de Lobo han llevado al desmantelamiento de una organización de tráfico de drogas a gran escala responsable del contrabando de cientos de toneladas de cocaína a nuestro país”, dijo la agente especial a cargo de HSI Miami, Alysa D. Erichs.
“El arresto y la sentencia deberían enviar un fuerte mensaje a los responsables de la importación de drogas ilegales a los Estados Unidos de que no descansaremos hasta que sean llevados ante la justicia”.
Lobo tuvo nexos con los narcotraficantes Devis Leonel Rivera Maradiaga, cabecilla del cartel de Los Cachiros y testigo colaborador de la DEA; Héctor Emilio Fernández Rosa, alias “Don H” y condenado a cadena perpetua, y otros personajes con los que discutió sobre un plan para detener el proceso de las extradiciones