Repunte de la inseguridad atemoriza a pobladores de la ciudad de Choluteca

CHOLUTECA, HONDURAS.- La delincuencia común mantiene atemorizada a los moradores de la ciudad de Choluteca. “Nos podemos salir ni al frente de la casa porque tenemos miedo que nos asalten”, denunció Rosa Melgares, habitante de la ciudad.

Decenas de familias sureñas han sido víctimas de robo en plena calle y otros dentro de sus negocios comerciales, sin importar la hora del día.

El repunte de asaltos se viene registrando desde el mes de diciembre del año pasado. Según datos de la Policía Nacional, desde diciembre hasta febrero se estuvo contabilizando entre seis y diez asaltos diarios.

Los barrios como mayor incidencia delictiva son El Porvenir, El Centro, el sector del estadio, La Libertad, Venecia, Brisas del Sur, Campo Sol y Los Graneros.

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Debido a los altos índices de inseguridad, muchos pobladores están poniendo portones y rejas en sus casas, lo que significa una gran inversión económica.

“Ya no se puede vivir tranquilo, uno ve gente sospechosa rondando las casas, por eso estoy poniendo rejas de hierro en mi casa, para evitar que se me metan a robar”, declaró Mario Laguna, habitante de la ciudad.

Para contrarrestar la inseguridad, autoridades de la Policía Nacional han tenido que incrementar los operativos y patrullajes en vehículos y a pie en los sectores con más índices de robo, pero los resultados son escasos.

Apenas la semana pasada capturaron a cinco miembros de la banda “Los Tumbados”, quienes realizaban robos en negocios y viviendas.

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“Esta banda de ‘Los Tumbados’ se dedicaba al robo y narcomenudeo y se les decomisó armas y drogas”, declaró Gerson Escalante, portavoz de la jefatura policial de Choluteca.

Sin embargo, los asaltos y robos siguen en ascenso. El vocero policial declaró que aún hay delincuentes que operan de manera independiente y a quienes la Policía les sigue la pista para darles captura.

Añadió que uno de los problemas para judicializar muchos de casos de robo es que las personas no llegan a presentar las denuncias y terminan dejando libre al delincuente por falta de pruebas.

“El problema que tenemos es que capturamos a los sospechosos pero la gente no viene a identificarlos ni ha interponer las denuncia”, dijo.

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