El ascenso y caída de Fabio Lobo: De juez penal a narcotraficante

En 2015, durante un intento de negocio de drogas en Haití, Fabio Lobo cayó en una trampa tendida por la DEA y fue arrestado por agentes estadounidenses

La historia de Fabio Lobo, hijo del expresidente hondureño Porfirio Lobo Sosa, es un relato de ascenso y caída.

Foto: Archivo

Nacido en una familia privilegiada en la década de los 80, Lobo ingresó al mundo de la política, optando por una carrera como juez penal y apoyando las ambiciones políticas de su familia desde las sombras.

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A pesar de no incursionar directamente en la política electoral, su vida acomodada como abogado y juez en Olancho le brindaba una posición privilegiada.

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Sin embargo, la sed de poder y riqueza lo llevaron por un camino oscuro, vinculándose con el mundo del narcotráfico a nivel local y posteriormente internacional.

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Su relación con “Los Cachiros”, una poderosa organización criminal hondureña, comenzó con el intento de explotar una mina en la zona de Colón.

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Después de eso se vio envuelto en actividades ilícitas que lo llevaron a ser condenado a 24 años de prisión en Estados Unidos por cargos relacionados con el narcotráfico.

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A pesar de su posición privilegiada como hijo de un expresidente, Lobo no escapó de la justicia, siendo arrestado en una operación encubierta en Haití en el año 2015. Posteriormente trasladado a Estados Unidos para enfrentar la justicia.

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Durante el juicio del expresidente Juan Orlando Hernández han testificado varios narcotraficantes hondureños.

Foto: Yoseph Amaya

Su testimonio ha salpicado a JOH, al que implicó en tratos con narcotraficantes y financiamiento ilícito de campañas políticas.

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Durante el juicio, el líder de la organización criminal “Los Cachiros”, Devis Leonel Rivera Maradiaga, afirmó que trabajaba en colaboración con Fabio Lobo, hijo del expresidente Porfirio Lobo Sosa, y que este último les proporcionaba ayuda desde su posición privilegiada.

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Según el testimonio de Rivera Maradiaga, Fabio Lobo utilizaba la escolta presidencial que tenía a su disposición cuando su padre ocupaba la presidencia de Honduras. Esta colaboración habría facilitado las actividades ilegales de “Los Cachiros”, aprovechando los recursos y la influencia política para sus propios fines.

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Por su parte, Fabio Lobo cuando testificó, denunció a su propio padre, Pepe Lobo, a cambio de una reducción de condena. Además, aseguró que el expresidente Porfirio Lobo Sosa estaba al tanto de estas actividades y recibía sobornos del narcotráfico a cambio de protección.

Foto: Cortesía

Estas explosivas acusaciones han sido rotundamente rechazadas por Porfirio Lobo Sosa, quien ha afirmado que no ha tenido contacto con su hijo en casi una década y ha negado cualquier participación en actividades ilegales.

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Aunque su condena ha sido rebajada debido a su colaboración con las autoridades, Fabio Lobo enfrenta un futuro incierto, marcado por su caída desde las altas esferas del poder hasta el oscuro mundo del crimen organizado.

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